Artista: Wobbler
Álbum: From Silence to Somewhere
Año: 2017
Género: Rock sinfónico
Duración: 46:37
Nacionalidad: Noruega
Aquí está la presentación de este disco de manos del gran Lino Cabrera, un gran amigo de la casa, por si quedaba alguna duda.Wobbler se ha hecho de prestigio como proveedores de un rock progresivo sinfónico de alta calidad, y tampoco defraudan en este álbum. Aquellos que saben que disfrutan del sinfonismo, los sonidos oscuros, los grandes climas, deben escuchar lo que traemos ahora aunque no estén familiarizados con esta banda.
Hace un tiempo atrás un amigo en un fabuloso foro (MPROG) me presento esta banda de Rock Sinfónico de Noruega, formada en 1999 por uno de los miembros de White Willow. Este grupo evoca fuertemente a King Crimson, Genesis, Gentle Giant junto con nuevas bandas sinfónicas progresivas como Änglagård y Anekdoten con una pizca de folk escandinavo e influencias clásicas en la mezcla.Lino
El CD debut de Wobbler se llamó "Hinterland" y contiene pistas largas y complejas con sonidos de teclados de un vintage exuberantes, haciendo un uso extenso de Mellotron, Mini-Moog, Hammond C-3 y clavecín, junto con una hermosa interpretación de guitarra eléctrica y acústica, una compleja sección rítmica junto con flautas, grabadora, saxofones, mandolinas y otros instrumentos que proporcionan un sonido sinfónico muy completo el cual me gusto muchisimo.
Hoy te traigo su último disco que espero les guste.
Con tres canciones largas (21, 10 y 13 minutos) y una cortita de dos minutos, se nos hace presente este "From Silence to Somewhere" que es toda una delicia digna de estar en la estantería junto con los grandes discos del género.
Y si no me creen, escúchenlo!
Aunque quizás muchos no los conozcan son veteranos de la escena de rock progresivo noruego y tienen un nombre reconocido y consolidado en los círculos especializados, con una carrera de 18 años atrás y conciertos en casi todo el mundo en su currículum. Hasta el momento tienen cuatro álbumes de estudio.
Wobbler es una banda de rock progresivo Noruega formada en 1999, influenciados por bandas de rock progresivo clásicas como King Crimson y Emerson Lake and Palmer pero desde la óptica escandinava, buscando un sonido setentero especialmente con el uso de instrumentos caracteristicos de la música de esa década como el mellotron, órgano de Hammond y clavinet.
Los noruegos Wobbler son probablemente el grupo más conocido de su país entre los seguidores del rock progresivo, en concreto de aquellos grupos que retoman las influencias de los clásicos del progresivo de los setenta hasta el punto de utilizar la instrumentación que usaban éstos en esa década. Con influencias de King Crimson, Genesis, Gentle Giant, etc, han construido un estilo muy personal desde 1999, año en el que iniciaron su carrera musical, con la publicación de tres discos hasta el momento. Entre sus filas hay miembros de Tusmørke, White Willow, The Chronicles of Father Robin y Jaga Jazzist, grupos con estilos muy distintos. Anuncian ya la publicación de su cuarto trabajo en estudio, disco en el que llevan trabajando años y que será publicado el 20 de octubre por el sello Karisma en formatos cd, vinilo y digital. Constará de cuatro temas y no defraudará a sus seguidores ya que anuncian que habrá cantidades de Mellotron, Moog, Hammond, Chamberlin y otros teclados analógicos y, por supuesto, bajo Rickenbacker (sic). Dicen que tendrá momentos melancólicos, más oscuros, toques flamenco y del Renacimiento italiano.Demetrio
Aunque muchos sonidos y riffs de viejas canciones clásicas progresivas continúan apareciendo en su música, ofrecen principalmente una colección distintiva de canciones con un sonido muy propio y una musicalidad extraordinaria, pero lo que más me impresiona de este álbum es la notable diversidad de opciones y estilos de instrumentos musicales y vocales. Uno escucha y espera el nuevo y sorprendente cambio inesperado de la música, en una gama que que va desde lo folcklórico escandinavo, lo medieval, lo psicodélico y lo sinfónico, con estados de ánimo fascinantes y muy bien logrados, crescendos potentes donde la banda navega entre atmósferas de refinada delicadeza, grandiosidad majestuosa y melodías maravillosas, con el sonido de la flauta agregando una enérgica luz a las partes melancólicas y oscuras. Además, en varios lugares pudieron llevar a cabo unas incorporaciones del estilo Gentle Giant que resultan exquisitas.
El arduo trabajo realizado por Wobbler durante los últimos 5 años ha dado sus frutos, convirtiéndolos en un gigante creando un álbum que recontra recomendable y una necesidad para cualquier oyente de la música profunda y con mayúsculas.
Para cerrar nuestra descripción de esta maravilla traemos el comentario de nuestro eterno columnista involuntario de siempre que nos da su punto de vista sobre esta delicia...
Saliendo del silencio: la nueva muestra de grandeza progresiva de parte de WobblerCésar Inca
Saliendo de un silencio de varios años, el grupo noruego WOBBLER regresa a un lugar protagónico dentro de la actual escena progresiva con su nuevo disco titulado “From Silence To Somewhere”, el cuarto de su carrera. El colectivo actualmente conformado por Lars Fredrik Frøislie [teclados y coros], Kristian Karl Hultgren [bajo, clarinete bajo y pedales bajos], Martin Nordrum Kneppen [batería, percusión y flauta dulce], Andreas Wettergreen Strømman Prestmo [primera voz, guitarra acústica, glockenspiel y percusión] y Geir Marius Bergom Halleland [guitarras solista y acústica, y coros] se luce a lo grande. El último de los integrantes mencionados reemplaza a Morten Andreas Eriksen. Yendo a la logística misma del disco, es de notar que el arsenal de teclados es muy vintage, no solo por el uso del órgano Hammond y del mellotrón, sino también por el del Chamberlein: teniendo en cuenta el peso que tienen los teclados dentro del esquema sonoro diseñado por el grupo, este es un dato realmente muy revelador. “Rites At Dawn” había supuesto en aquel año 2011 un testimonio de vitalidad musical decisiva dentro del camino de evolución y perfilamiento del cosmos musical de WOBBLER, y de hecho, para muchos de nosotros supuso su punto de madurez dentro del gran escenario retro-progresivo mundial. Con sus claros acentos Yessianos, ese disco supo concretar una magia peculiar y muy propia dentro del proscenio progresivo del nuevo milenio, y ahora su siembra ostenta una cosecha igualmente impresionante en el nuevo material compuesto para “From Silence To Somewhere”. Este disco fue publicado por Karisma Records en la segunda mitad del pasado mes de octubre, siendo así que el material que lo integra fue elaborado meticulosamente en sus procesos de composición y ulteriores arreglos desde el año 2016. Pues bueno, veamos ahora los detalles del repertorio, ¿vale?
La pieza homónima pone en marcha las cosas a través de sus casi 21 minutos de duración, tiempo más que suficiente para darnos una muy fiel muestra del tipo de vigor creativo que la banda ha estado fermentando en su temporada de silencio. De hecho, extroversión y luminosidad en generosas dosis es lo que hallamos en el cuerpo instrumental prologar, el cual dura poco menos de 3 minutos; una vez terminado éste, se abre paso a la primera sección cantada, la cual se orienta a través de una atmósfera más reposada y centradamente lírica, primero bajo el lánguido imperio de capas de mellotrón, y poco después, bajo la pauta de un entramado global que combina sabiamente lo épico con lo emotivo. Lo que escuchamos aquí es una especie de síntesis de los álbumes que hicieron los inmortales YES entre 1972 y 1974, incluyendo algunos elementos menores del legado Genesiano (etapa 71-73), lo cual a su vez supone que hay ciertas confluencias con los estándares retro-progresivos de bandas veteranas de posteriores generaciones como THIEVES' KITCHEN y THE FLOWER KINGS. Más adelante, este festín progresivo habrá de encumbrarse hacia un cénit de rotunda expresividad donde la estilización reinante adquiere una musculatura muy al estilo del legado de EMERSON, LAKE & PALMER, siendo así que este momentum es en realidad un puente hacia el ulterior realce renovador del lirismo contemplativo que le había precedido. El pasaje final es decididamente pastoral, al modo de una reflexión silenciosa dese la cual se quiere trazar una comprensión sobria del camino andado: sin tristeza ni melancolía, un simple reposo que se complace en el acto de reposar mientras disfruta de un último pensamiento. El segundo tema se titula ‘Rendered In Shades Of Green’ y dura poco más de 2 minutos: la combinación de remanso sonoro y concisión en el desarrollo temático centrado en las dulcemente parcas líneas de piano se beneficia bastante de los ornamentos de mellotrón y chamberlein que entran a tallar.
Cuando llega el turno de ‘Fermented Hours’, la banda recoge la cosecha de la monumental pieza de entrada y se dispone a concentrarse en los aspectos más robustos para empezar la nueva labor con una solidez rockera categórica y aplastante. Ahora parece que estamos volviendo a los tiempos de los dos primeros álbumes de esos héroes del prog sueco de primera generación que fueron los TRETTIOÅRIGA KRIGET, además de notarse también algunos tufos de orden menor a la esencia primigenia de los BEGGAR’S OPERA. Claro está, teniendo en cuenta que se trata de una pieza de casi 10 ¼ minutos de duración, el grupo desarrolla la ingeniería multitemática de esta canción a través de una interesante variedad de tempos y ambientes. Tras el razonablemente extenso cuerpo inicial emerge otro más lento donde la omnipresente vitalidad adquiere un tono más solemne, siendo así que su campo de expansión le permite cimentar convincentemente el camino para que el tercer motif, cuando llegue su turno, pueda devolvernos el fragor Yessiano que había sido tan predominante para la homónima canción de entrada. Para los dos últimos minutos, el grupo elabora un reprise del poderoso motif de entrada, y de paso, abre campo para que la guitarra se instale en un momentáneo pasaje protagónico y nos obsequie su solo más brutal de todo el disco. ¡Genial! Durando poco menos de 13 ¼ minutos, ‘Foxlight’ cierra el álbum ofreciendo un abierto contrapunto frente a la vehemencia señorial que había reinado plena y henchidamente en ‘Fermented Hours’. Ahora es tiempo de centrarse en coloridos más cristalinos y atmósferas otoñales, un poco al estilo del primer álbum de ANTHONY PHILLIPS. La sección prologar está marcada por la interacción etérea de guitarra acústica, glockenspiel, maderas y minimalistas capas de teclado; ya para cuando se instaura el cuerpo central, la banda crea una nueva modalidad de esplendor sinfónico con cuidadas amalgamas líricas tanto en los desarrollos instrumentales como en las líneas vocales. Los referentes claramente definidos son los GENESIS de la etapa 71-72 y los YES de la primera mitad de los 70s, siendo así que también hay espacio para la inclusión de algunos modismos señoriales propios del revival escandinavo de los 90s (WHITE WILLOW, ÄNGLAGÅRD). Las vibraciones extrovertidas de la sección final viran hacia una encantadora pomposidad palaciega de tenor Emersoniano, creando así un clímax filudo sin perder la exigente fineza de la claridad melódica que se había diseñado para cada pasaje individual de este largo tema. El final de esta pieza sintetiza muchos de los recursos de vitalismo expresionista que se habían hecho presentes en los temas #1 y #3, y por eso mismo respalda eficazmente el broche de oro que el disco de por sí requería.
Fueron más de tres cuartos de hora de continua y compacta grandeza prog-sinfónica los que nos brindaron los maestros de WOBBLER. “From Silence To Somewhere” es algo más que un muy buen disco de música progresiva: es un manifiesto de cómo se pueda germinar, organizar y concretar grandeza musical después de un largo tiempo de hibernación. Parece que este disco está recibiendo actualmente elogios mayores que los que cualquiera de los tres trabajos precedentes había recibido en su momento, y de hecho, en este humilde blog estamos muy tentados a declarar que se trata de su mejor disco hasta la fecha. ¿Por qué no afirmarlo de una buena vez? Mientras nos decidimos a hacerlo, lo recomendamos... ¡al 200%!
Calificación: 9/10
Como ya dijo el Mago Alberto, es al cuete hablar de música, la música simplemente se disfruta, así que mi última recomendación es... ¡No te lo pierdas!
Lista de Temas:
1. From Silence to Somewhere
2. Rendered in Shades of Green
3. Fermented Hours
4. Foxlight
Alineación:
- Lars Fredrik Frøislie / keyboards, backing vocals
- Kristian Karl Hultgren / bass, bass clarinet, bass pedals
- Martin Nordrum Kneppen / drums, percussion, recorder
- Andreas Wettergreen Strømman Prestmo / vocals, guitar, glockenspiel, percussion
- Geir Marius Bergom Halleland / lead guitar, backing vocals