Wonderland, del italiano Tom Tirabosco, es un ejemplo notable de novela gráfica en primera persona. En ella, recoge sus experiencias vitales infantiles y rastrea entre las influencias culturales que en aquellos años dejaron una huella posterior en su obra. Nos confiesa sus primeras influencias artísticas: el amor por los pintores italianos del Renacimiento que le contagió su padre; la impresión que le causaban las estampas ilustradas de la naturaleza y de la prehistoria del dibujante checo Zdenek Burian; o los cómics de Herge. En un momento de su repaso autobiográfico, cuando se refiere a los estímulos provocados por el cine, la television y el cómic, menciona a Walt Disney; y a Bambi en particular:…era un fanático de las películas de Disney / Peter Pan, La Isla de los Piratas, Mowgli, Bancanieves y Merlín… / Bambi. Todavía hoy sigo calculando la magnitud de los daños causados por esta gran película elegíaca y mórbida en algunos de mis trabajos actuales: cierto lirismo y una tendencia al sentimentalismo…Wonderland es una constatación del despiadado espíritu crítico del dibujante en su mirada al pasado, al mismo tiempo que una prueba evidente de que los temores sugeridos en la cita eran infundados. Porque si este cómic peca de excesos, lo hace por su crudeza, nunca por su sentimentalismo. Tirabosco recorre su infancia sin ahorrarse resentimientos, frustraciones y autocrítica.
Wonderland, de Tom Tirabosco. El peso de la mirada
Publicado el 20 mayo 2016 por Littlenemoskat @littlenemoskatWonderland, del italiano Tom Tirabosco, es un ejemplo notable de novela gráfica en primera persona. En ella, recoge sus experiencias vitales infantiles y rastrea entre las influencias culturales que en aquellos años dejaron una huella posterior en su obra. Nos confiesa sus primeras influencias artísticas: el amor por los pintores italianos del Renacimiento que le contagió su padre; la impresión que le causaban las estampas ilustradas de la naturaleza y de la prehistoria del dibujante checo Zdenek Burian; o los cómics de Herge. En un momento de su repaso autobiográfico, cuando se refiere a los estímulos provocados por el cine, la television y el cómic, menciona a Walt Disney; y a Bambi en particular:…era un fanático de las películas de Disney / Peter Pan, La Isla de los Piratas, Mowgli, Bancanieves y Merlín… / Bambi. Todavía hoy sigo calculando la magnitud de los daños causados por esta gran película elegíaca y mórbida en algunos de mis trabajos actuales: cierto lirismo y una tendencia al sentimentalismo…Wonderland es una constatación del despiadado espíritu crítico del dibujante en su mirada al pasado, al mismo tiempo que una prueba evidente de que los temores sugeridos en la cita eran infundados. Porque si este cómic peca de excesos, lo hace por su crudeza, nunca por su sentimentalismo. Tirabosco recorre su infancia sin ahorrarse resentimientos, frustraciones y autocrítica.