Wrap Up Mayo (2019)

WRAP UP
MAYO(2019)

 ¡Hola, hola, hola!

 JUNIO. Personalmente, no es un mes que me entusiasme – por Dios, ahora no me digáis que vuestro cumpleaños es en junio, o me sentiré muy mala persona por lo que he dicho (escrito) previamente –, pero ya huele a verano, ¿eh? Huele a horas muertas, esas siestas eternas que, no sé vosotras y vosotros, pero yo siempre que puedo las aprovecho para leer.

 ¿Algo bueno esta semana? Bueno, sinceramente no ha estado mal. He leído cositas maravillosas – de las que vamos a hablar ahora, sí – y… me he puesto tibia a pastitas. Ajá, aquí una servidora es muy fan de las trenzas de nueces pecán y cabello de ángel. Si no las habéis probado, ¡corred a hacerlo! La comida, que da la vida. ¡Pero ya vale de hablar de (escribir sobre) ñam ñam! La gula, que da mucho asco. Vamos con el recuento de mayo que, si bien es cierto que no viene tan cargado como vino el de abril – que podéis consultar haciendo clic aquí -, tiene libritos que valen, y mucho, la pena.

EL MAESTRO Y MARGARITA, de Mikhail Bulgakov

Nota: 5/5
(Reseña pendiente)

 Soy una cínica de manual. Una de esas personas que levantan las cejas cuando alguien le dice “esto es una obra maestra”. Porque las expectativas, y el pedorrismo, siempre juegan malas pasadas. Total, una tarde estaba sentada con mi señora madre y dijimos “¿por qué no probamos?” – sí, ya sé, ya sé: Carme, ¿qué haces leyendo con tu madre? Pues eso, que a mí me mola, ¿qué pasa? –, y allá que fuimos. Honra decir que nos reímos mucho mucho.

 ¿De qué va este clásico ruso? De una ida de olla de tres pares de narices. Moscú está sumida en esa tranquilidad que precede a las reuniones tensas. Para el caso, dos literatos hablan sobre lo ateos que son cuando, ¡sorpresa, sorpresa!, un misterioso extranjero aparece y les pregunta si creen en Dios o en el diablo. La conversación, que se pone cada vez más intensa, va a parar al miserable Poncio Pilatos, un pobre desgraciado que sólo tenía dolor de cabeza y… el extranjero, ese señor tan “curioso” dice que uno de ambos va a morir. Muy pronto. ¡Y tan pronto! No os voy a contar nada más, porque es una de olla tan salvaje, tan jodidamente brillante, que vale la pena descubrirla por vosotras y vosotros mismos. Sólo os diré que con Popota y Korokiev me reí a carcajadas. ¡Antes de que se me olvide! Si alguna vez la cagáis, echadle la culpa a Poncio Pilatos. Seguro que eso también fue culpa suya.

UNA OBSESIÓN PERVERSA, de V.E. Schwab

Bilogía: Villanos 1
Nota: 4/5
(Reseña pendiente)
 María, administradora de Mi rinconcito de libros y amor a tiempo completo, llevaba mucho tiempo dándome la paliza con que tenía que leer sí, sí o sí a esta autora. Claro, yo tenía un miedo bastante importante de llevarme un chasco – ajá, por segunda vez en el mes, yo con mis miedos gilipollas -, pero tuve que ceder con Una obsesión perversa. ¿Por qué? Oh, estaba leyendo un libro que se me atragantaba mucho – del que hablaremos (escribiremos) luego – y… me prometió que éste valdría la pena. Atención spoiler: acertó.

 Las personas que, como yo, sean escépticas en cuanto a qué hay entre las páginas de este libro, deberían darle una oportunidad. ¿Y por qué? Porque es jodidamente adictivo. Tanto que se lee prácticamente solo. Vamos a ponernos en situación. Victor y Sydney están cavando tranquilamente en un cementerio. Ajá, cada una, cada uno, se entretiene como puede. El caso. Nuestra pequeña Sydney, una niña de sólo doce añitos (juraría que esa es la edad, pero, vamos, que como mucho echadle un año más), le pregunta a Victor si él estuvo en la cárcel injustamente. ¿Y qué va a decir Victor? ¡Pero esperad, esperad! Antes de que os montéis una película de miedo en vuestras cabecitas preciosas, vamos a recapitular. Diez años antes, Victor iba a la universidad de Merit y compartía habitación con Eli, un chico muy inteligente y que, al parecer, tenía una idea para desarrollar de lo más curiosa. Puede parecer una premisa sencilla. Puede que lo sea. Pero es una locura. Una maldita locura, llena de mala hostia, con altas dosis de tensión que vale cada página. Porque sí, amigas y amigos, tal vez Victor no sea un santo… pero nadie ha dicho que quiera serlo y, en realidad, ¿quién nos dice a nosotras y nosotros que lo que pasó hace diez años sólo le implica a él?

HEREDERO, de Costa Alcalá

Trilogía: La segunda revolución 1
Nota: 5/5
(Reseña pendiente)
 Imaginemos que hubo una dictadura en la que unos controlaban mentes y otros lo controlaban todo. Imaginemos que usaban las familias que consideraban inferiores como soldados. Imaginemos una guerra. Una guerra atroz que se saldó con la caída de dos familias. Imaginemos una república en la que, teóricamente, hay paz. E imaginemos, ya que estamos, un Liceo en el que se entrena a alumnas y alumnos para dominar las diferentes Familias.

 Me ha flipado el libro. Si esto es lo primero que hacen Costa Alcalá – dos autores españoles que prometen, prometen mucho -, no quiero pensar cómo irán evolucionando. Yo tengo claro que lo compro. ¡Pero vamos con la historia! Kózel, Ilusión, sólo quiere estudiar y sacarse el curso sin problemas. No quiere saber nada de gente como Lórim, Aire, que ha venido a divertirse, a pasárselo teta. Nero, Azar, espera hacer amigos. Kástor, Fuego, no. Él quiere paz, esa tranquilidad en la que no tartamudea y que sólo deja que llene Enzo, Escudo, su mejor amigo. Vann, Tierra, no sabe qué pensar de Kózel, su nuevo compañero de habitación. Y Denna, Agua, lo único que quiere es ser la mejor. El caso es que todo se va a la mierda. Nuestros protagonistas, divididos en grupos que prefiero que descubráis por vosotras mismas, por vosotros mismos; ven que la paz está empezando a quebrarse. Y, por lo visto, Koem no es más que la primera ficha de ese efecto dominó que esta cada vez más tarde de romperlo todo.

CORAZÓN ELÁSTICO, de Elena Montagud

Trilogía: Corazón 1
Nota: 1/5
(Sin reseña para el blog)
 Ajá, este fue el libro que se me atragantó. Mucho. Demasiado. Creo que en Good Readsdije (escribí) todo lo que procedía, pero no quiero dejar el libro con una nota tan horrible sin dar explicaciones.

 Hay veces en las que una idea es buena, pero no se desarrolla bien. Ojo, porque no tengo ganas de entrar en si me gusta cómo escribe la autora o no, eso me parece bastante más subjetivo. Lo que quiero contaros es que, si bien la idea de partida era buena, se convierte en poco más que una excusa.  Blanca está jodida. Después de diez años sin pisar el pueblo en el que sufrió bullying a mano de una serie de personas que, la verdad, dan asco; ha convertido su vida en una espiral. Un círculo vicioso en el que todo se reduce a sexo sin compromiso, trabajo y algunas horas en la consulta de Emma, su psicóloga. Precisamente esta señora le recomienda que vuelva al pueblo. Es adulta, ¿no?, debe tomar las riendas de su vida. Y a Begoña, su única y mejor amiga, le parece estupendo. Pero, ay, qué jodido eso de volver a casa de papá y mamá cuando los demonios todavía nos muerden los tobillos. Como os decía (escribía), la idea no está mal. Vaya, a mí me gustaba. Pero ahora viene el declive. Adrián, el gran amor de su adolescencia, el chico con el que perdió la virginidad y que cumple todos los requisitos del chico malo que en realidad es un amor de persona; también anda por allí. Y le rompió el corazón. Se lo destrozó. Lo hizo pedazos. ¿Solución? Pues, como Blanca borracha es tan madura como sobria, no tiene otra idea que ponerse a joder con él. Abogada de éxito, muy profesional… pero muy inmadura. Como si volviera a la edad del pavo, basa su vida en el pueblo en tratar mal a sus padres – porque, claro, ella no es elitista, pero no para de pensar en que, en realidad, ellos no están a su nivel de vida -, llama a su hermano “niñato” y piensa hasta la extenuación en Adrián. Adrián, que aparece para enfadarse porque ella no quiere hablar. Adrián, que va de maduro y, la verdad, es tan crío como ella. No, no me gustó. No me gustó que el alcohol fuera una excusa, que ella se considerara a sí misma una “devora hombres”, sólo porque le gusta follar. No me gustó tampoco que, ¡cómo no!, los celos se usasen como una forma de demostrar amor. Ni siquiera me pareció gracioso, y os juro que yo soy de risa ridículamente fácil. Así que no, aunque me pese, no lo puedo recomendar. El final es… en fin, estoy sin palabras. En el mal sentido.

HARRY POTTER Y LA PIEDRA FILOSOFAL, de J.K. Rowling

Saga: Harry Potter 1
Nota: 4/5
(Reseña)
 Sí, os he dejado la reseña que hice hace unos años, cuando leí por primera vez el libro. En realidad, creo que es una reseña más sincera que la que pueda hacer ahora, leyendo una vez más la saga.

 Omaira, administradora de Entre la lectura y el cine; y yo decidimos dar una oportunidad más a la saga. Porque sí, porque siempre es muy chachi comentar un buen libro con una buena amiga. Y debo decir que, como siempre, fue genial ir comentando la jugada.Sigo adorando a los mismos personajes, miro con (leo sobre) ciertos personajes con bastante ojeriza y… me encanta haber vuelto, en cierto modo, a Hogwarts. Ese sitio precioso en el que nuestros tres maravillosos protagonistas se conocen, se hacen amigos y viven aventuras que, joder, hacen que, en realidad, no sean tan niños.

Y esto ha sido todo por hoy: 5 libros, sí, sí. ¡Pero vamos a dejar de hablar de (escribir sobre) mí! Os toca.¿Qué leísteis durante mayo? ¿Alguna relectura que os haya flipado? ¿Algún descubrimiento? ¿Algo que se os haya atragantado? ¿Coincidimos en alguna novela?
¡Contadme, contadme, contadme!
¡Un besazo muy pero que MUY grande y que paséis un maravilloso fin de semana!