Sin sorpresas culminó el WTA de Tokio, único certamen del circuito femenino que se estaba disputando esta semana. Caroline Wozniacki, máxima favorita, venció en el encuentro decisivo a la rusa Elena Dementieva, quinta sembrada, por 1-6, 6-2 y 6-3, tras dos horas de juego, y levantó el segundo trofeo de su carrera en el torneo. La danesa ya se había coronado en tierras japonesas en 2008, con una victoria sobre Kaia Kanepi.
A pesar de que Dementieva sorprendió en el arranque del partido y, en sólo 28 minutos, se llevó el primer parcial con mucha claridad (tres de ocho break points concretados y 73% de puntos ganados con el primer saque); Wozniacki logró recuperarse, fue creciendo dentro de la cancha con el correr de los games y consiguió dar vuelta la historia. Con dos quiebres en el segundo set y tres en el tercero, la danesa logró marcar diferencias en el marcador y llevarse las últimas dos mangas, para sellar su cuarta victoria sobre la rusa, en siete duelos que disputaron.
Wozniacki sumó, así, su quinto trofeo de la temporada. Previamente, se consagró sobre el polvo de ladrillo de Ponte Vedra Beach y sobre las canchas duras de Copenhaguen, Montreal y New Heaven. Ahora, la danesa se presentará en Beijing, en donde si logra alcanzar los cuartos de final, recuperará el número uno del ranking WTA.
Cuadro de singles de Tokio
Foto: Página Oficial de la WTA