Nosotros nos centraremos en su faceta como restaurante, que es interesante aunque con algún aspecto mejorable (la bebida debería estar incluida en el menú).
El servicio es muy atento y la comida está buena. La carta va cambiando pero, en general, se trata de platos elaborados con un toque original. El menú fin de semana cuesta 22 euros con el café incluido, aunque como hemos comentado antes, la bebida va aparte. Cuando fuimos nosotros, te ofrecían un aperitivo de la casa. Luego podías elegir entre pasta del día o una ensalada. Todo muy rico aunque, sin gran variedad. De segundo, había cuatro platos, dos carnes y dos pescados. Y como postre, puedes elegir entre otras dos opciones. En nuestro caso, entre copa de tiramisú o crema helada de frutas al cava.
La decoración es muy bonita y actual. Hay un reservado, un cuarto aparte, muy apropiado para cenas en cuadrilla.
En definitiva, buena opción para comer o cenar.
Pasta del giorno salteada con langostinos, verduritas y trufa blanca
Ensalada Capresse con tomate de caserío y mozzarela fresca de búfala
Taco de bonito de hondarribi con piperrada y caramelo de soja
Entrecotte de buey gallego al grill con piquillos al martini
Copa casera de Tiramisú
Crema helada de frutas al cava
Comida: 8Servicio: 8,5Decoración: 9Calidad/Precio: 8