Pedro Ximénez 100%
12.5 %VOL.
Bodegas Ximénez-Spínola
Jerez
A ver, es un vino no tan complejo como los que he mencionado, aquí no hay nada de botrytis, pero sí una sobre maduración de la uva pedro ximénez que le confiere al vino carácter y personalidad.
El resultado es un vino de color amarillo dorado, acerado, con aparente densidad. Con unas notas amieladas, otras de albaricoques, mejor dicho orejones, incluso notas de manzana asada. Me recuerda a la tarta de manzana que hacía mi madre, pero claro este es un descriptor algo particular. Mi madre hace las tartas de manzana con mermelada de albaricoque por encima, y al pasarla por el horno la manzana se asaba ligeramente. En boca tiene una ligera acidez maravillosa, y sin embargo, el vino no deja sensación dulce al final, al contrario, es más bien seco.El dulzor está presente, se le intuye, pero no se nota. Una delicia. Un vino muy particular.
La verdad es que el vino es ante todo sorprendente. Sorprende que un vino así elaborado y aquí en la zona del jerez, tenga tanta estructura, un soporte que seguro lo hará durar muchos años en botella.
La Bodega data de 1729, cuando Felipe Antonio Zarzana Spínola funda la compañia exportadora antecesora de la actual, que sigue siendo eminentemente familiar, con Jose Antonio Zarzana al frente del Consejo de Familia. Vinos únicos y particulares de una bodega particular y única, que solo está dispuesta a sacar toda la expresión a la uva pedro ximenez.
Sólo me resta agradecer a Armando Guerra, de La Sacristía, el haberme puesto por delante este vino, y poder saborearlo despacio en su misma sacristía.