Cada cosa a su tiempo.
Parece que en España tenemos unas estrategias un poco raras para afrontar una crisis. Lo que no se dice no existe. Y pase lo que pase, lo único que debes hacer para no tener problemas es negarlo. En un país, donde en el juicio más grande sobre corrupción, donde están imputados más de medio centenar de políticos, después de años, el único que ha resultado culpable es el juez que comenzó a sacar los trapos sucios. Donde un abogado es capaz de amenazar a un juez por que su cliente es una persona muy importante. Que podemos esperar.
Y, yo.
Por suerte contamos con una serie de ONG´s y asociaciones que luchan día a día por poner voz a los más necesitados. Aunque estoy seguro que en muchas ocasiones se deben sentir muy frustrados. Es el caso de Save the children, quien presentaba su nueva campaña de concienciación para el ciudadano. Ya nos olvidamos de hacer sentir algo a los políticos. Hace años que perdieron la moralidad. Supongo que cuando pasas por el control de seguridad del congreso, habrá un cartel que diga, deje su moral aquí hasta que acabe su carrera política.
Con un informe desolador, tratan de avisar de lo que se les ha olvidado contarnos a los
Lo más gracioso es que todo lo que hacen, lo respaldan con las leyes. ¿Cuales, las que ellos han creado? Si es casualidad.
La conclusión, es que cada día que pasa, más niños están en peor situación. Y son más de 2,5 millones los niños que viven en pobreza o están en riesgo de exclusión social. Estas cifras llevan creciendo desmesuradamente desde el comienzo de la crisis, y curiosamente, ninguna medida ha hecho reducir el número, sino que lo que ocurre es que el crecimiento cada vez es mayor. Y que podemos esperar, si el presupuesto que se ha dedicado a solucionar el problema es de 17 millones de Euros. Algo totalmente irrisorio, dada la situación y comparándolo con otros gastos que no tiene ningún sentido.
Pero, no pasa nada. Mientras no se diga nada en el congreso no existe. Y si por un casual, a alguien se le ocurre mencionarlo, con negarlo es suficiente. Ya se le olvidará a la gente.