Cada vez que se termina una obra cuesta un poco pasar página. Ideas nuevas parecen imposibles y es como si todavía 'respiras' la antigua obra. Estamos en esa época ahora mismo. Después de un intenso verano con "La Escalofriante Maldición del Viejo Caserón", parece imposible pensar en nada más que fantasmas y espíritus...
Hasta ahora, hemos buscado la idea central para cada obra de varias maneras.
Para "Donde Viven Los Monstruos" (2009), lo encontramos en un cuento infantil de Maurice Sendack.
Este cuento se presta al teatro porque:
- tiene una estructura muy clara
- incluye una serie de localizaciones variadas y visualmente interesantes (un bosque, el mar, una isla...)
- se centra en un tema complejo y relevante a pesar de su aparente sencillez (que lo hace ameno para los niños y interesante para los adultos/espectadores)
- además, se cuenta todo en unas 9 frases, en lenguaje poético y precioso, que se adapta fácilmente al papel del narrador
- la letra (y la melodía) son preciosas y muy emotivas
- tiene una estructura muy definida (como la mayoría de las canciones)
- también incluye una serie de localizaciones o eventos que son visualmente dramáticas: la playa, el océano, tormentas, piratas, un viaje por el mundo, el fondo del mar...
- se trata de un tema muy relevante para los niños (la agridulce aventura de crecer) y bastante nostálgico para los adultos