Y las Borreguis solo fueron el comienzo...
Por Pecados Capitales
@PecadosCap
Hay cosas que no me caben en la cabeza, la justificación que dan algunas personas para con el acto de la piratería es cuando menos, muy fantasioso. De repente, las “víctimas” se convierten en los delincuentes y los delincuentes en “víctimas”, ¿vivimos en un mundo al revés y nadie nos ha informado de ello?
Voy a ceñirme a lo que se refiere a la descarga de libros ilegal y especialmente a una parte de esas “lumbreras” que se lucran con el trabajo ajeno y encuentran en la piratería un supuesto medio de “ayuda” para los escritores. He llegado a leer barbaridades al estilo de, “las autoras deberían de darnos las gracias por piratear sus libros”, o “gracias a nosotras se están dando a conocer, si nos gusta hablaremos bien de ellas y seguiremos buscando más libros que hayan publicado”. Todas y cada una de esas personas se llenan la boca diciendo que “ellas son las que salvan a las autoras del fracaso, que si no fuese por ellas, muchas autoras no se las conocería”. ¿Perdóooooooooooooooooooon? Y me permito alargar la palabra, porque más surrealista no puede resultar la mente simplista de estas personas. Y el problema ya viene cuando dicho autor/a decide tomar medidas al respecto (algo totalmente válido, pues es el que tiene los derechos de dicha obra) y sí, puede que la primera vez vaya de buena fe y pida al encargado o encargada de dicho blog, foro o lo que sea, que por favor retire su libro. Pero cuando esta petición es ignorada, o incluso pasa a ser motivo de “burla” y el autor/a decide llevar las cosas por la vía legal… ¡Tercera Guerra Mundial aquí vamos! De repente el autor/a es un HDP, y hay que ir a su blog al puro estilo de la Santa Inquisición y ponerlo a parir a él/ella y a su obra. ¿Hola? ¿Hay alguien dentro de esa cabeza hueca y con neuronas muertas? Pero vamos a ver, almas de dios… ¿No os habéis parado a pensar en el ridículo que estáis haciendo con tales acusaciones? ¿En qué lugar estáis dejando quedar a la raza humana con elucubraciones de ese calibre? Es que llamaros “memas” sería insultar a las que entran en esa categoría, incluso las “borreguis” tienen media neurona más que vosotras. Por una vez en vuestra existencia, paraos a pensar en las perlas de sabiduría que soltáis por esa boquita, porque el ridículo que hacéis es bestial. Como está claro que nadie os ha ilustrado, voy a permitirme la licencia de hacerlo yo. Bien, veamos… Según tu súper mega chachi inteligencia, estás sugiriendo que una escritora, léase yo misma, me tiro… de la orden de seis meses a un año para escribir un libro. Si no tengo la suerte de contar con una editorial me busco la vida para corregirlo, maquetarlo, hacer el diseño de portada, el márquetin, me estrujo el cerebro para hacer la publicidad, me muevo por dónde sea para llevar mi libro y darlo a conocer… O si tengo la suerte de estar respaldada por una editorial (media neurona, no vayas a pensar que ya es el chollo de la vida de un escritor porque no es así, que tu trabajo como escritor no te lo quita nadie, y el márquetin ídem), tengo que regalarte “mi trabajo” porque según el universo en el que vives, tu ley dice que “yo tengo que escribir para que tú me leas “gratis” y estarte muy agradecida porque si no es por ti mi libro jamás vería la luz. Y por favor, escribe la segunda parte y dámela ya y gratis también, que ya estás tardando.” Pos vale… Sip. Por esa regla de tres entonces yo puedo ir a tu peluquería a que me cortes el pelo, me pongas unas mechas y me apliques un acondicionador de la ostia y totalmente gratis, porque oye, si no es por mí que voy y hablo de lo bien que cortas el pelo, nadie iría a tu peluquería, así que lo menos que puedes hacer es cortarme el pelo a mí gratis, y a toda la gente de mi círculo… Na, solo son unas doscientas o trescientas personas. Y mis disculpas a las peluqueras por ponerlas de ejemplo, que también me valdría cualquier otra profesión, que aquí hasta el más tonto sabe descargarse un libro, montar un blog y ponerlos gratis y después quejarse porque “me han denunciado” o “me ha amenazado”. ¿¿¿Hola??? ¿En qué mundo vivimos que he de agradecer a alguien que me “roba” por hacerlo? ¿En qué extraño universo hemos ido a parar que los escritores somos los “malos” y los ladrones hacen obras de caridad? Que a ver, seamos sinceros, todo el mundo, yo la primera se ha descargado libros alguna vez, pero de ahí a soltarle con toda la buena voluntad del mundo “no mira, tú sigue haciendo pan, porque sabes, está muy rico y yo voy a comerlo. Eso sí, no te lo pago, ¿eh? Suerte tienes ya de que sea una de las personas que lo prueban, porque si no es por mí, nadie sabría de tu panadería”. Es que no te pego un sopapo con la barra de pan de hace tres días porque no te tengo delante, pero permíteme por favor que me ría, porque lo haré, hasta que me salten las lágrimas. En los días que corren solo puedo decir… leer para creer.