Pasa tu luz sobre mi sombra en el frío del suelo extendida, y riega de cálida quietud las orillas evanescentes de sus bordes amenazantes... y la recoge entre sus grandes manos amigas, y la acurruca entre sus fuertes brazos de brillo deslumbrante...Luego la ilumina y se lleva el miedo, y me da la luz, y me eleva sin esfuerzo hasta el cielo de tu boca de hambre.
Vi entonces disolverse tu esencia en la mía, cual paloma en la tarde y bruma en la brisa....Y te vi posado en mi talle susurrando miradas, mintiendo verdades, demostrando mentiras. Porque vi que eres tu, quien como un ángel sobrevuelas mis campos secretos con tus alas torcidas y me entierras en dudas y me das la vida...