En contrastes los habitantes de acá suelen mostrarse muy conservadores y huraños, el caminar rápido y sin volver a ver atrás de la mayoría de sus mujeres, mayormente cubiertas con sus trajes musulmanes, siendo éste un grupo muy mayoritario.
La población ajedrecística presente acá es tratada a cuerpo de rey, nada de que quejarse, magnifico hospedaje en hoteles cinco estrellas, una alimentación abundante y variada de cinco tenedores, en la sala de juego siempre humeante café o té, botellas de agua a discrección de cada quien; casi sin necesidad de gastar el eventual dinero que cada quien podría traer en sus bolsillos. No incomodidades salvo los tediosos controles de seguridad que se tienen en la sede de juego en todo momento de la jornada, la psicosis por las eventuales trampas tecnológicas y lo último novedoso de pedir permiso hasta para ir al baño. Después de eso, todo bien.
Como ustedes queridos amigos no vinieron la web les lleva una pequeña muestra de lo que es Bakú capital de Azerbaiyán (ex URSS), también famosa por sus fuertes ventoleros que ayudan a promediar por estos días una temperatura media de 25 grados, es una ciudad cosmopolita de contrastes entre la vieja ciudad con sus añoranzas de imperios pasados siempre presentes y una parte al sur muy moderna y pujante, compitiendo como un polo de un país que vive y puja por estándar de vida altos como lo demuestra su alta tasas de alfabetismo, el poder adquisitivo (patrullas policiales BMW) y la planificación de una economía que no quiere vivir solo de su materia prima fuerte como el petróleo sino que se abre paso con proyectos en desarrollo poderoso con el gas.
El dolar ni se menciona en la ciudad, podríamos decir que no corre, Pese a su pujanza los precios de productos no son exorbitantes como los de las urbes europeas, por decir algo, la ciudad sede anterior de la Olimpiada Tromso, en donde los precios eran, simplemente exorbitantes. Acá una coca cola servida en el restaurant del hotel anda por los $4, correspondiente en su moneda El Nuevo Manat, una carrera de unos veinte minutos en taxi unos $5. A propósito de este servicio de transporte que lo prestan mayormente carritos negros (estilo londinense), hay también sus taxis piratas y aunque no lo crean, hasta acá ha llegado UBER.
Para que se sientan como que si estuviesen acá les mostramos lo que el lente turista de nuestra web logró captar en un recorrido por una parte de esta bella ciudad, capital de un país prospero y pujante.