El pasado mes de Febrero nos escapamos a Madrid porque en Andalucía teníamos puente. Era un viaje que nos apetecía muchísimo y, como veréis, la verdad es que nos cundió, pero pese a todo ¡me dejo tanto por ver!
Fue antes de la gran crisis del coronavirus y es un viaje que siempre recordaremos con muchísimo cariño.
Sin duda, volveremos. Os cuento hoy, lo que ví, dónde comimos y dónde nos alojamos por si os resulta útil.
1. Organización de nuestro viaje. Qué vimos.
1.1. Primer día: Aranjuez y Madrid centro.Salimos por la mañana de Granada, sobre las 9 y media, y a las dos horas paramos a tomar un café y descansar. En hora y pico más, pasadas la una, estábamos en Aranjuez.
Allí vimos el palacio, almorzamos y paseamos por los jardines.
Llegamos a Madrid a las cinco y algo, paramos en el apartamento para soltar las maletas y salimos pitando en metro para el centro. Pensábamos ir al Thyssen pero conseguimos llegar a él a las 18:30 y como cerraba a las 19:00, decidimos dejarlo para el día siguiente y disfrutar del centro, sus tiendas y propuestas gastronómicas.
1.2. Segundo día: Museos y un encuentro muy especial.
Nuestro segundo día fue muy cultural: visitamos El Prado por la mañana (estuvimos más de tres horas y medio disfrutándolo), almorzamos en un bar muy recomendable (os cuento en el próximo punto) y a la tarde recorrimos el Thyssen, donde además de disfrutar sus cuadros habituales, pudimos entrar en una exposición temporal de Rembrandt.
Al lado de El prado, en la preciosa iglesia de San Jerónimo.
Y al caer la tarde noche, vino lo mejor del día (y mira que fue redondo) conocer a mi querida y admirada Tita Hellen, a quien conozco cibernéticamente desde hace ¡diez años! y nos leemos y comentamos habitualmente. Compartimos una velada agradable en la que el tiempo pasó volando y hablamos de temas humanos y divinos. ¡Por cierto! Es tan dulce, inteligente, con sentido del humor y linda...como delata en sus textos. Hemos quedado en repetir cita, ya sea en Andalucía o de vuelta a los Madriles.1.3. Tercer día: Rastro...y vuelta a casa (en contra de mi voluntad XD). El último día, como era domingo, lo dejamos para ver El Rastro antes de partir de vuelta. ¡Me encantó! Y no solo a mi, mis hijas disfrutaron muchísimo viendo los puestos y compraron camisetas, posters para sus dormitorios, funkos...¡una locura! Yo fui prudente y no compré nada, pero Manolo me regaló dos pares de pendientes. Aprovecho para enseñaros mis souvenirs del viaje: Tras tomar un tentempié, salimos para Castilla la Mancha, adonde almorzamos y sobre las ocho, llegamos a Granada, ¡me moría de ganas por ver a Betty, a quien mi cuñado Paco cuidó de maravilla! (¡Gracias, Paco, eres un tío perruno fantástico!).
Fragancia, imán, chocolatina (ya pasó a mejor vida) y libros de Historia del arte y "Heroínas secretas" de Aranjuez.
Cuaderno (lo he usado como "Diario de viaje" y pendientes de Madrid.
2. Alojamiento: Nuestro apartamento.
Os tengo que contar bien sobre el alojamiento porque estaba GENIAL. Aunque se anuncia como "apartamento", es en realidad un piso con tres dormitorios (dos camas de matrimonio y una individual), dos baños, una cocina y un salón. Además, algo genial es que estaba muy bien situado (en Vallecas, con una parada de metro a menos de 5 minutos en la línea 1, en veinte minutos estábamos en todo el centro de Madrid) y por otra parte era muy tranquilo, ideal para descansar. Estaba bien equipado (cafetera, secador, horno, lavadora...) e incluso tenía detalles monos de decoración, de ésos que te hacen disfrutar de tu estancia. Si os interesa, esta es la web de los dueños.
3. Comer: sitios que recomiendo.
Os cuento dónde comimos, qué y una valoración.3.1. "Casa Navarro", en Aranjuez.
Cerca del mercado de Abastos, con una terraza al solecito y una carta muy variada. Los platos son ENORMES y menos mal que nos avisaron.
Comida casera y precios razonables.
Arriba, papas deluxe con queso y bacon y ensalada con queso de cabra.
3.2. "Bar Tapas y Vinos II", en Madrid centro.
Nos salió la recomendación en Google maps y la verdad es que estuvo genial. El sitio es super bonito, con detalles vintage y los camareros, super amables y simpáticos.
La carta es muy variada (ensaladas, pizzas, croquetas, empanadas, tostas...) y de precio, también razonable.
Ensalada de pollo y tosta de pimientos asados y melva.
3.3. "Bar Vermú".
No podía irme de Madrid sin probar uno de sus típicos vermús caseros y en este bar lo ponen riquísimo...
Lo dicho, si algo nos ha quedado claro de la capital...es que TENEMOS QUE VOLVER....