Tengo que reconocer que el otro día me quedó mal cuerpo cuando aseguramos que la Gorra abrigaba más que un Sombrero. La cosa no podía quedar así, tenía que buscar algún factor de utilidad en el que el Sombrero superase a la Gorra, para que los usuarios del Sombrero pudiesen defender su utilidad. De cara al verano está claro, el Sombrero sin duda nos protege mucho más que una Gorra de los efectos del sol, pero en el invierno la cosa está más difícil.
Después del frío el siguiente elemento más molesto que nos podemos encontrar es el de la lluvia o la nieve. Cuando caminamos bajo la lluvia sin la protección del paraguas las molestas gotas de agua golpean nuestra cara, y solamente la protección del ala de un buen sombrero o gorra nos salvara de la mojadura.
¿Pero qué nos protege más eficazmente, el sombrero o la gorra?
La gorra es muy eficaz contra el frío y gracias a su visera también es perfecta para evitar la lluvia en la cara. Pero solamente lograremos proteger esta parte, dejando al descubierto orejas y cuello.
Por contra el sombrero gracias a su ala nos protegerá mucho mejor, cubriendo cara, orejas y cuello. Además cuanto más ancha sea el ala más protección nos proporcionará.
Solamente recordar que también debemos asegurarnos de que gorras o sombreros estén preparados para soportar el agua, una característica que debemos consultar a la hora de adquirirlos. Aunque en el caso de los sombreros de invierno, en su gran mayoría vienen preparados e impermeabilizados para soportar la humedad de la lluvia y la nieve.
Pues ya lo ven hoy nos toca decantarnos por el sombrero ante la gorra, cada uno destaca por una característica. Si lo que desean es abrigo, la gorra, y si lo que buscan es la protección frente a la lluvia, el sombrero. De momento estamos empatados: Gorra 1 – Sombrero 1.
Visto en: Sombrerería Albiñana