Aunque no sea con mala intención, esta es una pregunta muy típica que nos puede hacer la vecina del 4º o la señora desconocida y metomentodo que nos podemos encontrar en la frutería.
¿Y qué opino yo de esto?
Soy consciente de que esta pregunta se hace esperando saber si el bebé llora mucho o poco, porque realmente, ¿un bebé puede portarse mal?
¡Pues no, qué lástima!
Si un bebé llora mucho es porque le pasa algo. O bien tiene alguna necesidad sin cubrir o simplemente quiere estar con su mamá. Sí, en brazos. Eso da otro tema del que hablar, pero dejémoslo para otro día.
Bichito ha tenido días que, aún teniendo todas sus necesidades cubiertas, tampoco le servía cualquier postura en brazos y ha entrado en un bucle de lloros-quejidos que saca de quicio a cualquiera. Pero si alguien me pregunta si se porta bien, solo me sale decir “hombre, pues claro, ¡es un bebé!”. Y además pongo cara de “¿pero qué mierdas dices?”
Quien piense que un bebé es un ser malévolo que ha venido a aprovecharse de nosotros, está mal de la azotea. Pero muy mal.
Sí que considero que es cuestión de suerte tener un bebé más quejica o menos, que duerma más o menos, que tenga cólicos y se pase horas y horas llorando sin consuelo, ¿pero eso le convierte en un bebé malo?
No. Porque un bebé no tiene malas intenciones, tan solo está flipando con su nueva vida fuera del útero y necesita a sus padres ahí con él. Porque puede ser que una simple etiqueta del body le esté molestando hasta el infinito, pero a nosotros ni se nos ocurra mirárselo. Porque es el bebé el que tendría que responder si nos portamos bien, o no, sus padres con él.
Pero evidentemente nadie se atrevería a preguntarle “y tus padres, ¿se portan bien contigo?”. Primero porque el bebé no habla, y segundo porque mandaríamos a freír espárragos a quien dudase de si cuidamos bien o mal a nuestros hijos, ¿verdad?
Ellos también podrían responder “pues no, porque quiero que me hagan caso y ni me miran” o “ni de coña, me dejan con el pañal meao bastante rato y a mí se me cuece el culo”.
Así que, jamás se me ocurriría pensar, por muy chungo que tenga el día mi pequeñín, que se ha portado mal. Otro gallo cantará cuando empiece a tomar decisiones y a hacer travesuras, pero de momento es un bebé, y sus pipís son agua de ángel (es lo que quiero creer por la cantidad que me cae encima).
Contadme, ¿creéis que pueden haber bebés malos?