¡Ya es hora de ahorrar energía!

Por Caretheearth @CaretheEarth
Este domingo, 29 de marzo, cuando el reloj marque las 02.00 horas, será necesario adelantar el reloj a las 03.00 horas, con el objetivo de consumir menos electricidad y aprovechar la luz del sol. Este gesto implica un ahorro potencial estimado de energía que podría alcanzar el 5%, es decir, unos 300 millones de euros, según estimaciones del Instituto de Diversificación para el Ahorro Energético (IDAE). 

Una fecha verde que nos quitará una hora de sueño -suponiendo que consigamos dormir esa noche del tirón- y supondrá un notable ahorro en términos económicos. ¿Y cómo se realiza el cambio de hora? No, levantarse a las dos de la madrugada para cambiar los relojes manualmente no es una solución práctica ni recomendable. Recordemos que por norma general, los móviles actuales, denominados 'smartphones', hacen el trabajo "duro".

Cada uno de nosotros, somos responsables del ahorro energético, a lo largo del año, y no sólo cuando realizamos el cambio de hora: apagar la luz al salir de una habitación, utilizar bombillas de bajo consumo y lámparas LED como alternativa eficiente a las lámparas halógenas, decorar las viviendas con colores claros, e instalar detectores de presencia en zonas de paso en negocios, son acciones individuales que nos permiten contribuir a ese ahorro de una manera sostenible e ininterrumpida.
La Directiva Europea que rige el denominado 'Cambio de hora' para toda la Unión Europea fija que el horario de verano comienza en el último domingo del mes de marzo y termina el último domingo de octubre. Esta medida se aplica en unos 70 países en todo el mundo: en todos los países de Europa, América del Sur, África y en algunas zonas de Estados Unidos y Canadá, excepto en Japón que es el único país industrializado que no se ha adaptado a esta normativa.

Por tanto, debemos ser conscientes de la importancia de estar atentos al cambio de hora, fundamentalmente para no llegar tarde a nuestros respectivos compromisos, ser precavidos a la hora de irnos a dormir y constituir una parte activa de esta acción global que, aunque es una medida puntual para ser más sostenibles, tiene importancia para el Medio Ambiente.