Si queréis saber la crónica completa de quien estuvo y qué hicieron, podéis leer el post de mimitos de mamá, que lo explica fenomenal.
Yo quería comentar las conclusiones de este día.
- Me quedo admirada, de que haya personas que nos llamaran para ofrecerse a animar ese día con actividades para los niños y para que los padres aprendiéramos. Creo que hay gente maravillosa con ganas de trabajar, de ayudarnos y de compartir momentos.
- Jorge, de El estudio de Blanca, fotógrafo que estuvo en toda la quedada haciendo fotos, sin parar ni siquiera a comer.
- Maite de creativa y estimula, que impartió varios talleres, sobre estimulación sensorial, llanto por aburrimiento y juego de percursión corporal.También Maite explicó el taller de masaje shantala que en principio 5mimitos iba a dar y que finalmente no pudo estar presente.
- Debo decir que 5mimitos, regaló a todas las familias, 38 familias, una bolsa que incluía una pelota hinchable con información para estimular el gateo para bebés a partir de 4 meses, estimular el equilibrio para bebés a partir de 6 meses, ejercicios de estimulación para bebés de 1 a 2 años y ejercicios para estimular la lateralidad.
- Raquel de Mamifit, me dejó loca con ese cuerpazo y más me sorprendió con los ejercicios que propuso para las mamás. A pesar de que pocas madres nos animamos a hacer los ejercicios, tanto ella, como las otras personas que venían con ella, fueron super positivas, animando a que siguiéramos haciéndolo.
- Diana de Feliz en brazos, explicó el porteo, el buen porteo, el tipo de mochilas que se pueden usar y los beneficios del porteo.
- Alejandra, de Peque en Familia, con psicomotricidad para los más peques. Por cierto, me encanta su carácter positivo y su energía.
- Natalia al frente de El trasgu, con sus compañeras, que estuvieron pintando caras e hinchando globos. Con mucho ánimo a pesar de que muchas de las familias, ya se estaban retirando, pero ellas siguieron hinchando globos y haciendo reír a los niños.
- Los niños se portaron de maravilla, me quedé asombrada cuando en el círculo que habíamos formado para escuchar a los responsables de los talleres, los niños estuvieron bastante tranquilos. Sólo teníamos que confiar en ellos y eso ayudó mucho.
- Conocí a gente que sólo vi por redes sociales y me encantó ponerles cara, así como vinieron personas que ya conocía y también me gustó compartir con ellos este día.
- Comer al aire libre, disfrutando de la familia, algo que no hacía desde hace mucho, una experiencia bonita. Además compartimos alimentos (esto suena muy cristiano) pero como dicen en mi casa, la comida compartida sabe mejor. Y desde luego, me quedo con el salmorejo, que me alegró mi filete de pollo empanado, solitario y de dieta, hecho por el marido de una madre bloguera, Lorena.