Ya nació y no me siento feliz.

Por Afloratuser
Se sentó en el sillón de la consulta y me dijo: ya nació...pero no me siento feliz, con esta expresión su cara se inundaba de lágrimas. ¿Cuántas mujeres sienten esto, luego de dar a luz?, ¿por qué algo que muchas consideran maravilloso, puede ser al mismo tiempo, algo que abrume?. Como mamá y terapeuta, reconozco que cada embarazo es muy distinto, pero ¿por qué cuando nacen, existen reacciones hay tan diversas? Bueno, me parece importante compartir algunas de mis notas florales al respecto y poner este tema sobre la mesa desde una perspectiva complementaria.¿Qué es la depresión?, etimológicamente, el termino depresión significa opresión, encogimiento o abatimiento. Para la sicología es un síndrome en el cual las personas sienten una profunda tristeza, lo que puede generar inhibición de las funciones psíquicas. En la actualidad y según la OMS es un problema mundial, alcanzando en mayor parte a mujeres, diagnostico que se observa con mayor frecuencia, durante el embarazo y puerperio (después del parto).Si bien, siempre aconsejo que sea diagnosticado médicamente para clasificar como depresión el cuadro, los síntomas que comúnmente he visto en la consulta son: insomnio, tristeza, irritabilidad, falta de ánimo, ansiedad, culpa, nerviosismo, incluso a veces con razón o por "sensación" se menciona constantemente; la falta de apoyo, por parte de la familia o pareja, haciendo mucho más difícil este periodo, no obstante, la paciente muchas veces siente que todo esos sentimientos no tienen sentido y eso la lleva a un sufrimiento extremo, a tal punto que muchas no reconocen los síntomas por vergüenza a sentirse o ser catalogadas como malas madres. En resumen, casi el 15% de las madres sufren depresión después del parto, que les impide disfrutar de su maternidad.Para que estemos todas en la misma línea, las etapas del postparto son cuatro, las cuales se les denomina como: puerperio inmediato, mediato, alejado y tardío.La etapa uno, son las primeras 24 horas postparto, en el cual se recomienda dentro de las posibilidades que la madre recupere sueño y repose del trabajo de parto. Es ese minuto en donde la mujer comienza a ser consciente de lo acontecido y comienza a fortalecer el lazo con su bebé, es realmente importante que aproveche al máximo ese tiempo entre descanso y mimar a la nueva vida.A continuación en la etapa dos, que comprende desde el segundo día hasta el décimo, la mujer experimenta cambios (anatómicos) en los diversos sistemas que componen el cuerpo, junto con experimentar la lactancia de una forma más natural que el primer día, lo cual puede dar paso a las contracciones uterinas.Continuamos con los siguientes días desde el 11 hasta el día 45 del postparto, o sea, etapa tres. Acá generalmente la madre ya esta en casa e interactuar constantemente con el bebe y con el entorno, lo que puede llevar en un inicio a una sensación de mucho agotamiento o poca paciencia. La clave sin duda, es permitir que más gente cercana se involucre de una manera sana con este nuevo integrante: papás, hermanos, abuelos.Y para finalizar esta la etapa cuatro, desde el día 46 hasta el día 60. Este es un periodo que si bien, sigue siendo de adaptación, los cambios emocionales de la mujer están a flor de piel y fisicamente se comienzan a ver las cicatrices, temas de peso, en donde muchas vuelven a sentirse como antes y otras no. Desde mi perspectiva y en lo que me compete, creo que las expectativas generan un gran estrés en este periodo.Para resumir, el puerperio o postparto, es conocido como cuarentena, momento en el que la madre se adapta a esta nueva vida y todos los órganos involucrados vuelven a su situación inicial.Ahora, vamos al área floral, ¿cuáles son las esencias que generalmente contemplo para esta etapa?. Bueno como siempre digo, no existe la mejor fórmula, sino que la diferencia la marca la capacidad diagnostica del terapeuta para escoger las esencias más acertadas, no obstante, les comparto algunas frecuentes.Olive: Nos entrega la energía necesaria para llevar el cansancio físico y mental por falta de sueño.Walnut: Para adaptarnos a todo, a la nueva rutina, la organización y sobre todo confieso que para proteger de las influencias externas como los miles de mejores consejos y comentarios que muchas veces, pueden angustiar aún más a la madre.Mustard: Si bien, ayudará en caso de sensación de tristeza, me parece que es muy adecuada por todos los cambios hormonales, físicos y emocionales que se viven en este proceso.Elm: para sobre llevar el agobio de las nuevas responsabilidades, siéndose la mujer a veces incapacitada.Sweet Chestnut: En caso de angustia.Pine: Uf me encanta, nos ayuda con el sentimiento de culpa de cualquier tipo en este periodo, que a veces pueden ser muchos.Chicory: Me encanta porque la vinculo a todo lo que involucra el sentimiento entre madre a hijo, liberando la expectativas y dando paso a que se permita fluir la relación.Aspen y Red Chestnut: ¿y si algo le pasa a mi bebe? , para esos miedos y sobre todo que suelen estar presentes en la cabeza de la madre de manera constanteCrab Apple: Nos permite amarnos y aceptar nuestro nuevo cuerpo, evitando la baja autoestima y temas relacionados como la baja de libido.Impatiens: Personalmente tengo un bajo umbral de dolor, por lo que una crema por ejemplo si hay áreas de cicatrización o bien, los pezones, nos ayudará a sobre llevar la incomodidad que puedas sentir en el proceso (combinada con elm es muy efectiva).Lo más importante es siempre recordar que no existe la mejor madre, eso lo escriben los libros, tus expectativas... la libre crianza es lo que nos hace tan esenciales y seres individuales, la oportunidad de crianza respetuosa, la cual no es una guía inamovible, sino más bien, la oportunidad que la mujer tiene y la sociedad debe dar espacio (respetar), a desarrollar la mejor maternidad para su hijo(a) y ella, siguiendo su intuición, su corazón.Un abrazo maternal, Marcela.