Haití es hasta ahora el país más afectado por este huracán, que es considerado como el más fuerte de la última década en el Caribe. Casi 30.000 haitianos se encuentran en albergues improvisados, mientras que unos 10.000 se hallan sin refugio.
Los organismos se emergencia continúan tratando de llegar a comunidades severamente afectadas por el fenómeno, que azotó el pasado martes Haití y obligó al aplazamiento de las elecciones generales previstas para el próximo domingo 9 de octubre.
Organizaciones no Gubernamentales expresaron su temor a un agravamiento de la crisis humanitaria en uno de los países más pobres del planeta.
Oxfam Intermón dijo temer que el balance de huracán Matthew continúe agravándose y pidió la movilización internacional urgente.
Asimismo, consideró urgente garantizar agua potable e higiene para evitar que se propaguen enfermedades como el cólera, epidemia que afectó el país tras el terremoto de 2010.
Por su parte, Unicef informó hoy que medio millón de niños vive en las zonas de Haití más golpeadas por el huracán Matthew.
Unicef indicó que necesitará 5 millones de dólares para hacer frente a las necesidades más inmediatas creadas en este empobrecido país por el potente huracán Matthew. El papa Francisco expresó hoy su "tristeza" por las víctimas que dejó el huracán Matthew y manifestó su "proximidad espiritual" con todas las personas que perdieron sus casas. Mientras tanto, decenas de personas heridas han empezado a llegar a la capital, Puerto Príncipe, desde la ciudad de Dame Marie, en el sur del país, la región más afectada por Matthew.
Las autoridades haitianas no han podido aún determinar la magnitud de los daños y temen que la cifra de muertos vaya en aumento a medida que los socorristas consigan acceder a los lugares que se quedaron incomunicados. La mayoría de las muertes se han producido en Les Cayes, Dame Marie y Jeremie, en el departamento Sur. El acceso al departamento de Grand Anse, en el suroeste, severamente afectado, está limitado al transporte aéreo.
Fuente Agencias