Yo no existo. Hazte a la idea de que sólo soy un deseo, una idea, una elucubración; un anhelo, una fantasía, una utopía; un invento, una ocurrencia, un pensamiento; una intuición, un antojo, un capricho; un espejismo, un trampantojo, una ilusión.
Yo no existo. Hiciste que existiera. Tanto me pensaste que ahora soy de verdad. Tu realidad. Es una lástima que sólo tú puedas verme, porque a ojos de los demás haríamos una pareja preciosa.
Yo no existo. Para ellos. Para ellos no. Pero para ti siempre existiré. Nadie tiene por qué saberlo. Toma la medicación. Niega que estoy escribiendo y tarareando canciones para ti. Con algo de suerte en unos días te liberarán de la camisa de fuerza y volaremos de nuevo.
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