Yo soy Charlie y las demás víctimas del terrorismo

Publicado el 13 enero 2015 por Xarlie79

Vaya por delante mi rechazo a los atentados terroristas perpetrados la semana pasada en Francia. “Je suis Charlie” porque estoy a favor de la libertad de expresión. Charlie Hebdo es una revista satírica que critica a diestro y siniestro a lo divino y a lo humano. Los terroristas que han cometido los atentados, los justifican como venganza contra la publicación en 2006 de las viñetas de Mahoma divulgadas anteriormente por la prensa danesa.

Estoy en contra de los atentados producidos en Francia pero también estoy en contra de las muertes que acontecen a diario en Siria e Irak por causa del mismo terrorismo. De la misma manera que estoy en contra del terrorismo de estado perpetrado por Israel en Palestina y de los bombardeos de Occidente (Estados Unidos y aliados) en Irak, Siria y un largo etcétera. En ambos casos, se pretende imponer la democracia por medio del terror. ¡Vaya incoherencia!

Los dioses (el mío, el tuyo y el de los demás) no son malos por naturaleza. Las religiones que se han creado a su entorno como la judía, la cristiana como la musulmana provienen de una misma región (Oriente Medio) y predican la paz. Así, el mal no está en la religión sino en la instrumentalización de ésta. En nombre de la religión se han cometido y se cometen crímenes contra la humanidad. Crímenes amparados por los sacerdotes de turno. Por eso, rechazo el fundamentalismo religioso sea del tipo que sea.

A menudo, desde Occidente cometemos el crimen de enjuiciar de diferente manera los hechos si afectan a occidentales o a orientales. Salimos a la calle para protestar la injusta muerte de los periodistas de Charlie Hebdo pero omitimos los crímenes, también injustos, que Boko Haram comete a diario en Nigeria. De vez en cuando, los medios de comunicación nos informan que los gobiernos occidentales han bombardeado a los fundamentalistas islámicos. Es para limpiar su conciencia pues un día les bombardean y al día siguiente les venden armas.

En definitiva, estoy en contra de la hipocresía de Occidente que mide de diferente rasero a las víctimas en función de donde son. Y por otro lado, estoy en desacuerdo con los crímenes en nombre de la religión, sea la que sea. En cambio, estoy a favor de la libertad y de la libertad de expresión siempre que no se incite a la violencia contra quien es diferente a ti. Estoy a favor de la convivencia entre personas de diferentes religiones pues hemos de ser capaces de convivir en paz. Es tarea de los gobiernos pero también del tejido social evitar la creación de guetos donde se conjugue la pobreza y la discriminación de una etnia o religión. De esta manera, se ha de evitar que las banlieue se conviertan en un nicho de jóvenes sin futuro dispuestos a todo con tal de salir de una sociedad que les rechaza.