Pero la operación tiene otras implicancias. El megapulpo mexicano es también accionista del grupo financiero español La Caixa. A su vez, La Caixa controla el 13% del capital accionario de Repsol. En los últimos dos años, Slim ha inyectado recursos en La Caixa para contribuir a su rescate de la bancarrota de la banca peninsular. La Caixa, a su turno, detenta el 20% del banco mexicano Imbursa, controlado por los Slim. Entre Slim y La Caixa, por lo tanto, hay un fuerte entrelazamiento accionario. El lugar que pasa a ocupar Slim en YPF reforzará la posición de la petrolera española.
Según ha trascendido, el aterrizaje de este socio mexicano de La Caixa a YPF no se produjo solo: fue resultado de largas gestiones de uno de los principales asesores de Slim, el abogado Juan Manuel Abal Medina, furioso kirchnerista y padre del actual jefe de Gabinete. En definitiva: para reemplazar a Ezquenazi, el cristinismo fogoneó el ingreso a YPF de un aliado de Repsol.
Marcelo Ramal