¡Segunda receta del día, Calderer@s!
Y no es porque me haya dado un ataque publicador, si no que por primera vez han coincidido en fecha los dos retos en los que participo con este blog: el reto Color y Sabor de Temporada en el que participamos con la receta de crema de peras con mostaza dijon y almendras, y el reto de #elAsaltablogs en el cual cada mes, desvalijamos la cocina del pobre bloguero escogido por la Alcaparrona.
Este mes le ha tocado el turno al blog de Rosa Romero, “La Rosa Dulce” donde tenemos cientos de recetas para elegir, de todo tipo, (tradicionales, exóticas, dulces, saladas…). Un blog muy completo de donde seguro os lleváis algo interesante si os pasáis.
Como nosotros nos hemos llevado esta interesantísima receta que desconocíamos por completo, ¡y eso que es cocina tradicional española! Cuanto me queda por aprender aún. Se trata del zarangollo murciano, una receta que se elabora con ingredientes típicamente provenientes de la huerta murciana y aunque originalmente se preparaba sin incluir la patata, yo me he animado a incluirla siguiendo la sugerencia de la receta de Rosa, que podéis encontrar aquí.
Ingredientes: (para 2 personas)
- 1/2 cebolla
- 1 calabacín
- 2 o 3 dientes de ajo
- 2 patatas pequeñas
- 2 huevos
- aceite de oliva
- sal y pimienta
Elaboración:
Me ha encantado este plato, pues no solo es super sencillo y económico de hacer, si no que además se prepara en un periquete, es sano y está delicioso.
En primer lugar, cortamos el calabacín por la mitad a lo largo, y luego a su vez lo hacemos láminas finas.
Mondamos y lavamos la patata y las cortamos igual que el calabacín, en láminas finitas. Cortamos la cebolla en juliana y los ajos en ruedas.
El una cazuela, ponemos cuatro cucharadas de aceite de oliva, y a fuego lento, cocinamos las patatas hasta que empiecen a ponerse trasparentes y a cambiar de color. Incorporamos entonces la cebolla y los ajos y seguimos cocinando a fuego lento, removiendo de vez en cuando.
Cuando la cebolla esté trasparente, y las patatas comiencen a dorarse, incorporamos el calabacín. Cocinamos durante unos minutos más, hasta que el calabacín esté tierno y pierda el agua.
Batimos entonces enérgicamente los dos huevos y los incorporamos a la sartén, subiendo un poco el fuego para que cuajen bien.
Removemos para integrar el huevo con el resto del guiso y cocinamos un par de minutos, hasta que el revuelto esté hecho a nuestro gusto.
¡Y ya tenemos listo nuestro zarangollo!
Como habéis visto, un plato sano, rico, rápido y de ingredientes sencillos….¡lo tiene todo!
No os olvidéis de pasar por el blog de La Rosa Dulce para descubrir el resto de sus recetas.
¡Que aproveche, Calderer@s!
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