De acuerdo con las fuentes consultadas por Vozpópuli, la petición pública de Navarro “trastocó” esos planes aplazados durante unos meses, aunque la idea era concretar la abdicación “antes de que acabe la instrucción del caso Nóos”, prevista para finales de este año. “La elección de esa referencia temporal tendría mucho que ver con la puesta en marcha del pacto, patrocinado por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y adelantado hace días por este diario, según el cual Iñaki Urdangarinse declararía culpable a cambio de eludir el banquillo de los acusados. La materialización del relevo en la jefatura del Estado antes de tal pacto facilitaría el camino de acceso al trono del Príncipe Felipe, evitándole el mal trago de tener que soportar las protestas sociales que ese arreglo por arriba pudiera provocar. De acuerdo con las fuentes, el aplazamiento de la abdicación habría supuesto más que un ‘contratiempo’ en los planes del Príncipe”.
Aníbal González cuenta que hace unos días, Rafael Spottorno, Jefe de la Casadel Rey, mantuvo un almuerzo off the record con un reducido grupo de periodistas que le plantearon la reacción real en el caso de que los partidos mayoritarios, PP y PSOE, o en otras palabras, Gobierno y oposición, decidieran un día acudir a la Zarzuelapara presentar al Monarca la necesidad de proceder a un relevo en el trono. La respuesta de Spottorno fue contundente: “Entonces sí que no; eso, en ningún caso. El Rey no admitiría ningún tipo de presiones para forzarle a abdicar. Esa es una decisión personal del propio Monarca”.
“Las fuentes consultadas –asegura González– atribuyen la urgencia de la abdicación en Semana Santa al grave deterioro experimentado por la salud del monarca. En efecto, el próximo 3 de marzo, y por séptima vez en su vida, el Rey entrará en un quirófano para ser intervenido quirúrgicamente en la clínica La Milagrosa de Madrid de una hernia discal que padece desde hace años y que se ha agudizado en los últimos meses. ‘Esta no es una operación de cadera más; esto es algo mucho más serio –aseguran dichas fuentes – estamos ante una intervención cuyo resultado podría llevar al Rey de forma definitiva a la silla de ruedas y, en cualquier caso, dejarle fuera de juego durante meses”.