El Zeer (لزير) es un frigorífico hecho de barro y arena que no necesita electricidad.
Aunque se conoce el principio desde el antiguo Egipto este diseño se está extendiendo gracias al diseño del nigerianoMohammed Bah Abba, ganador del premio Rolex Awards por sus esfuerzos para hacer llegar este producto a los más pobres y a las zonas rurales.
Consiste en dos vasijas de barro, uno dentro de otro. El espacio entre ambos se rellena de arena mojada y finalmente se cubre con un trapo húmedo.
La evaporación del agua -aun a temperatura ambiente- refrigera la comida contenida. Esto se debe a que se evaporan primero las moléculas de agua de mayor energía (léaase temperatura) quedando las de menor temperatura.
La refrigeración que esto proporciona es suficiente para hacer que alimentos perecederos duren varias semanas.
Este principio es el que se usa en el ya no tan popular botijo español. Tambien en la india se ha aplicado desde hace tiempo. Sin duda sería interesante escalarlo y recuperarlo en el mundo desarrollado tambien.
via Ecoinvento