Zombi KindergartenPedro Escudero ZumelISBN: 9788415104506 Formato: Tapa blanda con solapas - 80 Págs. Editorial: 23 Escalones
¡Buenas a todos!
Hoy por fin os vengo con la reseña prometida. Esta vez la estructura será diferente a la que suelen tener, ya que si ya los libros de relatos son difíciles de reseñar, los de micro-relatos aun más todavía…
Para saber más del autor, AQUIArgumento
Recopilación de 40 micro-relatos y un cuento breve, cuyo protagonista principal es un niño zombi, convertido en no-muerto por el mismísimo Barón de Samedi. Todo ello combinado con ilustraciones de Luis NCT, que reflejan muchas de las pequeñas historietas.
Mi opinión
Este librito ha sido sacado a la luz por mi nueva editorial favorita “23 escalones”, que publica básicamente terror y de gran calidad. Nuevos escritores españoles que no tienen nada que envidiar a los afamados extranjeros.
En concreto me llamó mucho la atención esta edición, ya que su portada promete algo macabro y divertido, cumpliéndolo con creces. Según lo tuve en mis manos fue mirar la contraportada y me encontré con esta brevedad que casi me mata de risa:
—Mamá, hambre.La madre del niño zombi empujó al fontanero por las escaleras del sótano.Siempre cuidaría de su pequeño.
Y así hasta cuarenta. Cuarenta pequeñas gracias, con mucho humor e inteligencia. Plagado de ironías y críticas al mundo mezcla referencias religiosas (no aptas para cerrados de mente), a películas y juegos infantiles.
Al niño zombi se le coge cariño. Vale que destroza todo a su paso, es macabro, y te acabará comiendo. Pero es muy gracioso… Y en el fondo se siente muy solo siendo un no muerto.
Si no carcajadas (para los que somos de risa fácil), este libro te arrancara más de una sonrisa y querrás leerlos todos seguidos, disfrutando de cada palabra. Descubrirás que el niño zombi no come cerebros (porque pasaría mucha hambre) o que le gusta ir al parque (a jugar con la comida).
Para rematar la tarde, al final nos presenta un cuento corto, apenas unas 4-5 páginas. Se titula “Una familia feliz” y en cierta manera está relacionada con la triste historia del niño zombi. En ella sale un estilo menos irónico, y más tenso e íntimo, mostrándonos que el autor no solo tiene imaginación, sino también talento.
Porque escribir estos micro-relatos debe ser realmente difícil. Además de tener una idea brillante, seguramente llevará horas y horas de depurar la frase, reduciéndola hasta que no sobre ni una sola palabra.
También hay que destacar la importancia de la colocación de los relatos a lo largo de las páginas. Porque aunque parezcan pequeños chistes, podemos entrever una historia más amplia desde cómo se convirtió en zombi, pasando por sus comportamientos habituales, costumbre alimenticias y pequeños pensamientos.
Sin duda es un libro que recomiendo, ya que a pesar de que se lee de una sentada, su precio es casi irrisorio y merece la pena conservarlo a mano para poder releer algunos de los más graciosos.
No solo para los que nos gusta el terror o los zombis, este libro es apto para todos los públicos siempre que tengas sentido del humor y la mente abierta.