Como ya lo sabrán hace unos días atrás pedí a Musu que me arme una selección de vinos, a su elección, en base a unas líneas relacionadas con el estilo que prefiero beber actualmente. Uno de los primeros que me sugirió fue, casualmente, este Zorro y Arena. Fue el primero que descorché de aquella tanda y la botella casi voló de una sentada.
Color rojo teja de capa media-baja, brillante y muy glicérico. En nariz es espectacular, con mucha fruta roja tipo cerezas, puntas a caramelo de leche (no pasa por madera) y un fondo muy presente que no sabría definir muy bien pero que Fabián citó como salvaje. Podría ser, pero a mí me recordó más a monte bajo, mixturado con notas terrosas y piedras. En cualquier caso lo hace muy atractivo. La boca es sumamente sedosa, los taninos están redondos y pasa por boca con mucha intensidad (nada de dulzores por ningún lado) y una frescura que lo equilibra y hace fácil de beber y muy sabroso.
Me gustó muchísimo, para repetir y esperar un tiempo y valorar como sigue. Su precio fue de $170 (sobre los 11 €) y la RPC muy buena.
Buena vida y buenos vinos,
Salute, Rumbovino.Difundiendo la cultura del vino y en favor del consumo moderado y responsable.