Hoy lunes y después de una breve pausa quiero traerles una recomendación. Seguramente muchos ya se han animado a ver el documental, pero si aún queda alguien dudoso ya digo que vale la pena verlo y mucho.
Yo soy de las que creen que el colegio sí es necesario y beneficioso la mayoría delas veces para los niños. Pero también es cierto que el sistema educativo necesita un cambio. Estoy totalmente de acuerdo en lo que dice este documental de que actualmente más que enseñanza en los colegios se realizan adiestramientos. Es necesario que se tenga en cuenta la individualidad de los pequeños, por muy difícil que les pueda resultar. Que bajen el número de alumnos en el aula sería algo genial para dar un paso más en este sentido. Así como también supervisar al profesorado.
Aprovecharé para contar una experiencia que vivimos el curso pasado en el colegio.
A media mañana suena el teléfono en casa. Me llaman del colegio para avisarme que G traen la mochila un parte de incidencias que se le ha abierto por hacer unas regañizas al profesor. Por lo visto el profesor le pidió que se sentase, y él en vez de sentarse, cuando el profesor se giró hacia la pizarra le hizo una regañiza. Sinceramente no me pareció nada bien que se le abriese un parte de incidencias a un niño de seis años.
Pero dejando eso de lado, cuando los peques llegan en el transporte escolar y comienzan a bajar, cada uno de niños de la clase de G me dice que Martín (uno de los profesores) le pegó al niño. Cuando le pregunté a G si eso era cierto el pobre mío se quedó impresionado, lo negaba. Pero yo con ver su cara ya sabía que me mentía, mi niño tenía miedo y yo no sabía el porqué. Así que después de comer retomé el tema con él, le hablé y le expliqué que no pasaba nada, que si eso era cierto el profesor había hecho muy mal y yo necesitaba saberlo para acudir a hablarlo. Hasta que finalmente me dijo que sí que era cierto, que le había dado en la carita. Como comprenderán el mundo en ese momento se me vino encima. Me vi con sentimientos encontrados, pena por mi niño, y rabia por el atrevimiento de esa persona.
Así que a primera hora me encontraba en el colegio para hablar con la directora. En vista de la gravedad del asunto llamó también al profesor aludido, el cual con toda su cara confirma el hecho, con la excepción de que no llegó a golpearle sino que se dio él en su mano. Yo aparte de no creerme su versión ya que casi 15 niños se la echaban abajo, le dije que me importaba tres pimientos si llegó o no darle, él no es nadie para hacer siquiera ese gesto. Ante la situación dije claramente que viendo lo sucedido lo justo sería quitarle el parte a mi hijo y ponérselo a ese profesor, pero como ya se podrán imaginar la cosa quedó en nada.
Y a esto es a lo que me refiero con que los profesores sean supervisados, hay que tener en cuenta que sean personas realmente capaces y aptas para educar a los pequeños mientras están en el horario escolar, y que no pierdan los nervios fácilmente.
Para todos, tanto el que cree en el sistema educativo actual como el que no, recomiendo que vean este documental. Después de terminarlo yo creo que es imposible no replantearse nada.