Revista Cocina

Ajoblanco ajonegro

Por Evasionesculinarias @EvasionesC
No hace mucho, gracias a las chicas de Qué bien como, conocí el ajo negro. 

El proyecto Qué bien como surge para acercar a nuestras casas la buena alimentación, con productos de buena calidad y de temporada. En su web, además de poder comprar cestas de fruta y verdura de temporada, legumbres y otros productos, también encontrarás consejos de nutrición y horarios de los cursos y otras actividades sobre cocina saludable que ofrecen. Uno de los productos que podemos comprar en la web de Qué bien como, son los ajos negros. El ajo negro es un ajo fermentado, tras este proceso se aumentan los beneficios que tiene el ajo para la salud, además conseguimos un producto estupendo con el que elaborar recetas. AJOBLANCO AJONEGRO El ajo negro no pica ni repite, como el ajo, y tiene un toque a regaliz y tofe. La textura del ajo negro permite untarlo   sobre una rebanada de pan. Nosotros en esta ocasión hemos jugado contrastando sabores y colores. AJOBLANCO Y AJONEGRO CON HUEVAS DE ERIZO


AJOBLANCO AJONEGRO
INGREDIENTES:
(haremos algo más de cantidad de ajoblanco que de ajonegro para esta receta)

Ajoblanco


120gr almendras crudas
400ml agua
60gr miga de pan
60ml AOVE
Sal
1 o 2 dientes de ajo

Ajonegro


80gr almendras crudas
300ml agua
40gr miga de pan
40ml AOVE
Sal
5 o 6 dientes de ajo negro

Además:


Huevas de erizo
Brotes de brócoli
AJOBLANCO AJONEGRO

Tanto para hacer el ajoblanco como para hacer el ajonegro, juntamos todos los ingredientes en un vaso batidor y trituramos bien todo junto. Probad bien de punto de sal y, si lo queréis más espeso o más líquido ir añadiendo agua o miga de pan.

Tened cuidado con el ajoblanco, añadir poco a poco el ajo hasta que consigáis el punto de sabor y picor que os guste. Yo lo hice suavecito, no quería que se comiese todo el sabor del plato. Con el ajo negro no tendréis tanto problema, al añadir más le dará más sabor dulzón, pero este ajo no pica ni es tan fuerte. Ambas mezclas hay que pasarlas por un colador fino para que su textura sea más agradable a la hora de comer. Como veis en las fotos, el ajoblanco queda con un color muy blanco y, el ajonegro tiene un tono grisáceo  un truco para que quede más contraste es usar colorante alimenticio negro en el ajonegro.

AJOBLANCO AJONEGRO
Emplatado:


En un plato hondo o en vasitos verter ajoblanco sin llenar del todo y, a un lado o en el centro, echar un poco de la crema de ajonegro.  Añadir unas huevas de erizo de mar, que acompañan genial a las dos cremas y unos brotes, en este caso son de brócoli, le dan un punto más fresco y una textura agradable.

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas