Revista Cultura y Ocio

Dia 57: Loneliness, the kiss...

Publicado el 26 diciembre 2010 por Matilido
Dia 57: Loneliness, the kiss...
"Te veo y estas preciosa como siempre, aun más si es posible. Me cuesta dejar de mirarte... me pierdo en tu sonrisa. Soy plenamente conciente de que no puedo dejar de contemplarte mientras siento que tu belleza me rodea como un halo de niebla lento e inexorable. Es superior a todo lo que imaginé, eternamente más poderoso, infinitamente más complejo. Todo lo que hay alrededor parece frio y difuso. Te sonrío y sabés lo que pienso, sonreís sonorojada, nada te hace más linda a mis ojos. Me acerco despacio. Tu aroma me atrapa, tu belleza es inconmensurable. Siento tu aliento cuando me inclino a besarte, el momento es perfecto. Me detengo a disfrutarlo e inhalo profundamente, mientras que con una mano acaricio tu rostro y retiro tu pelo. Tu suave cabello en el que adoro perderme. Sigo adelante, y te beso. Todo ocurre tan lento. Nos separamos un instante, solo para que puedas abrazarme y quedarte alli hasta que el amanecer nos llame de nuevo o el graznido del cuervo nos despierte del silencio...

Todo esto ocurre en menos de un segundo, en algun callejón de mi mente. Vuelvo a la realidad con tristeza. Es simplemente otro sueño solitario. Sigo avanzando por el bus y te miro de reojo al pasar por tu asiento. Y es solo eso en la realidad. Jamás conoceré algo de vos,  yjamás te enterarás de mi existencia; mejor así, definitivamente mejor así. Sos una, y sos muchas, sos parte de un colectivo de recuerdos de una vida solitaria. Te mantiene en mi mente la esperanza de que algún día seas real. Me avergüenzo por un segundo, hasta que encuentro mi asiento. Miro por la ventana cansado por las lides del dia, siento la brisa veraniega de la noche joven, y dejo que la música ocupe mis sentidos, que los demonios del dia ocupen mi mente, y que tu recuerdo vuele y no vuelva más."

Más de una vez me cuestione acerca de si debia o no escribir esto en este espacio. Me decía que quizá es más digno del otro blog, y al mismo tiempo me contestaba que no. Esto es algo más  frívolo quizá o al menos cursi. y como siempre pensé que dejaría esta idea atrapada en mi, como tantas otras, y en el fondo se claramente que la quiero sacar. En eso caí en la conclusión de que vivo pidiendo permiso para ser yo. Peor que eso... vivo pidiendome permiso a mi mismo para ser yo. No puede ser que este frio juez que se cree superior a mi mismo (cuando no es más que una parte de mi) siga mandando. Mas aun, entonces recordé (¿Cuándo no...? a Gandalf): "Los actos generosos no han de ser reprimidos por fríos consejos". Por lo mismo decidí publicarlo, aun cuando no parezca de este blog. Aún cuando no parezca salir de mi. En si, opté por ser generoso conmigo mismo, aun a costa de mostrar algo que a priori considero demasiado íntimo, al punto que puedo hasta negar que sale de mi. No way...
En cuanto al texto en si, no salió exactamente como lo tenia en mente. Creo que es imposible hacerle caso a tantas voces, tantas ideas, y no menos opiniones. Algunas son complementarias, otras francamente opuestas. Y no ayudan las millones surgen nuevas mientras escribo. Mi primer idea era expresar de una manera menos sentimental, más bien un simple relato, como si fuera una canción, con la esperanza que la situación se transcribiera en la mente y creara el sentimiento. Esto mutó casi enseguida. De tode el torbellino solo saque en claro unas escasas ideas que habia hilvanado como cuerpo del relato, pero parecian incompletas a la hora de la escritura. Entonces mi hemisferio izquierdo (al cual a veces odio y otras tantas bendigo y que aloja por lo menos un par de personalidades incluyendo al juez ya mencionado) terminó armando una cosa un poco más sentimental, probablemente con ayuda del meloso hemisferio derecho, pero lo peor de todo es que el susodicho izquierdo se cree poeta, asi que cree que escribir bien es escribir como en verso, cuando la verdad es que ignora lo que es escribir bien.
No se si salio del alma, de mi imaginación o de mis sueños. Está unida al sentimiento de que merezco una oportunidad de vivr algo asi. Y al miedo de que ocurra y no este preparado para aprovecharlo, y que no sea lo suficientemente maduro para estar a la altura de la experiencia. Estaré loco, pero que la locura sea mi manto, un velo a los ojos de mi enemigo. Lo triste es que siento que tanto para esto como para otros aspectos de mi vida, yo soy mi propio enemigo.
Un rato antes, mientas leia tranquilo, disfrutando el viento de la noche en el porche de mi casa, no paraba de observar la plaza que de en frente. Como en toda noche, esta se ve inmersa en una semipenumbra que es interrumpida solo de tanto en tanto por las tenues luces anaranjadas de lo focos de bajo consumo, y cortada al medio por los potentes reflectores de los edificios de la cercanía de modo que deja un corredor central para cruzarla. No podía dejar de contemplar  a las parejitas que pululaban por allí. Y en comparación verme yo solo con mi libro como siempre. ¿Alguna vez tendré la suerte de estar del otro lado? ¿Y si lo deseo tanto, por qué no hago nada para conseguirlo? No pude dejar de añorar que el relato que iba escribir, si me decidía a hacerlo, se tornara real, por lo menos una vez. He de admitir que en algún platonismo he imaginado que me ocurra un hecho similar. Aunque siempre me dio vergüenza admitirlo, por respeto a quien imagine y porque en ocasiones me hece sentir tonto o inmaduro; y definitivamente odio que me haga ver tan raro. Sin embargo nunca paso de eso, de una intelección. Y rara vez surgió como algo espontáneo (como muestro en el relato). Tampoco quiero que piensen que es algo que me ocurre a menudo, nada más lejos de la realidad. No es la transcripción de un recuerdo sino de muchos, ni siquiera de sentimientos, solo  fueron situaciones  platónicas superficiales, de ahi que se mencione tanto la belleza. Ni siquiera son todas evocaciones reales, muchas ocurrieron en mi mente a modo de evasión, en tristes momentos de soledad. Pienso que en el fondo es un hecho simple, es el resultado natural de la soledad en alguien que vive más cómodo en su mente que en la realidad.
Ignoro si a esta altura alguien entiende algo, creo que hasta yo me perdi. Cosa habitual en estos dias. Es dificil llevar un hilo cuando la mente vaga en muchas direcciones.La idea -o ideas- ronda en mi mente desde hace unos dias, no se por qué. Y creaciones más complejas de este tipo abundan desde hace rato. Como ya dije, he de ser sincero y admitir que hay muchos yo en juego -algun dia trataré de pasarles lista-. Indudablemente el ser romántico que me habita (pienso yo que en el lobulo derecho, pero bien puede ser un farsante del lado izquierdo) tomo por un momento el control de este ser humano. Y quizá ese sea el quid del asunto... ¿No será que después de todo, el tipo es humano?
Con el aprecio de siempre, un gran saludo!!!

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