Donde las aceras mienten

Te espero donde las aceras mienten
donde los semáforos enamorados
regalan flores a los peatones
rojos y verdes
Te espero donde las esquinas muerden
con el dulce colmillo del deseo
y se rebelan en inmensa pared
si no las doblas bien
Te espero donde las farolas encierran
luciérnagas que leen poemas
y no crecen si no las riegan
Te espero donde los versos se sientan
en terrazas infinitas a leer personas
Te espero en aquella avenida somnolienta
donde cada carril mide lo que tus piernas
y en la que los besos tocan el claxon
al adelantarse por la izquierda
Te espero donde los trenes deambulan
devorando pasajeros que nunca vuelven
Te espero donde los viejos rascacielos
alivian el picor en las barrigas de las nubes
que se llueven de gusto sobre los transeúntes
mientras estos tararean gozosos canciones
de viejos musicales que no llegaron a estrenarse
Te espero donde las Hadas portan pancartas
reivindicando el color de sus alas
Te espero donde se desalojan banqueros
de los bancos de los parques
Te espero donde siempre
donde las aceras mienten
cuando el viento del Sur las obliga
a pronunciar nuestros nombres.