El romanticismo ha muerto

Definitivamente; ya está confirmado. El romanticismo ha muerto; murió en un suicidio colectivo junto con el sentido del humor y la tolerancia, o quizás fue un asesinato a manos de la "corrección política". Ahora todo es ofensivo, todo es delito o todo debe ser prohibido. Cuando uno hace un comentario siempre sale alguien diciendo que tal o cual palabra ha sido mal utilizada, o es peyorativa, o incita a la violencia, o al terrorismo... O es machista, facha, o ambas cosas. Sí, ya es oficial, tras el último San Valentín, el romanticismo ha muerto. Una pena.

El romanticismo ha muerto y no hemos hecho nada por evitarlo

Esta vez ha sido en la cuenta de Twitter de la Policía. Una cuenta que, bajo mi punto de vista, está siendo bastante bien utilizada en general y a menudo consigue lo que quiere: caer bien y acercar la Policía a la ciudadanía. Yo no creo mucho en esas cosas, pero admito que me parece una buena iniciativa. Por eso podemos ver mensajes que poco tienen que ver con el carácter policial y no en balde tienen más de dos millones de seguidores (quién los pillara).

El tuit de la discordia era, bajo mi punto de vista, perfecto para el momento, educado y romántico con un toque de humor, especialmente viniendo de donde venía:

Miles de MeGusta y miles de retuits, pero las quejas y las críticas no se dejaron esperar:

La primera que vi llegó de Izquierda Unida:

"Si te roba un beso es acoso sexual y debéis actuar, no incitar".

Pero hubo más:

La Niña Ventresca (que no diré lo que opino de ella) dijo:

"No, si te "roba" un beso sin tu consentimiento, puede ser abuso machista. Pero a lo vuestro".

Y una tal Clara se despachó bien a gusto con un par de mensajes:

1.- En serio, no ayudáis nada.

2.- Un beso no consentido puede llevar mucho más que solamente ese contacto. Decir que no es delito es una frivolidad falsa y peligrosa.

Lo peor de todo: que al final hayan tenido que rectificar.

"Si TU amor te "roba" un beso por sorpresa ¡Disfrútalo! Si alguien te roba un beso sin consentimiento #denuncia.

Y yo me pregunto: ¿Acaso no se entendía bien el primer mensaje? ¿En serio era necesaria la rectificación?

El otro día, en un artículo sobre abusos sexuales en este blog usé la palabra "cinismo" y un lector me recriminó diciendo que eso era ofensivo para los cínicos que practicaban una determinada corriente de pensamiento. Tuve que explicar que cinismo significa otras cosas y no solo eso, pero está claro que siempre hay alguien que se ofende.

También Pérez Reverte se quejaba el otro día, y con mucha razón, en un artículo titulado Imbéciles sin fronteras cuya lectura recomiendo. Aquí transcribo un pequeño fragmento:

Acabo de recibir carta de un lector afeándome que use la frase enfermedad histórica. No ya cáncer, como cuando hace poco una lectora con esa dolencia me recriminó, muy destemplada, escribir cáncer de la sociedad, o cuando otra, también señora, criticó que utilizase la palabra autismo político para definir la cara de pasmado, la parálisis facial -otra enfermedad, por cierto- con que Mariano Rajoy se ha enfrentado en sus cuatro años de legislatura, entre otras cosas, a la insultante arrogancia del ex presidente Mas y sus compadres. Ahora, ese lector bienintencionado me pide que reflexione sobre lo mal que pueden sentirse los enfermos de cualquier clase y estado cuando se topen, en mis textos, con esa desafortunada expresión: enfermedad histórica [...]

¿En qué nos estamos convirtiendo?

Ramón Cerdá

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