«El tercer lago», de Marta Huelves

«La maldición de la bruxa se proyectaba sobre ella. Ella era la hija de la bruxa. Salió de su casa en busca de ayuda… cruzó el bosque, tiritaba de frío y fiebre mientras veía el fuego crepitar en el interior de las casas. En todas la rechazaron… cayó junto a la roca donde murió. Cuentan que faltaba una hora para el amanecer cuando un rayo solitario descargó con tanta fuerza sobre la piedra, que dibujó en su recorrido esas vetas rosadas…. La madre de todas las tormentas. Cuenta la leyenda que cuando eso sucedió, la pequeña despertó.»

Reseña escrita por Maudy Ventosa.

La escritora madrileña enamorada de Asturias, Marta Huelves, vuelva con fuerza tras el éxito obtenido con La memoria del tejo; su nueva novela, El tercer lago, como la anterior, está publicada por Editorial Maeva. Protagonistas por derecho propio, nos encontramos otra vez al inspector Salvador Bedia y a la agente Marina Roldán, dos policías con personalidades opuestas que se complementan en sus diferencias a la perfección para forman un tándem de éxito, ayudados por un equipo de expertos que, como hormiguitas, van tejiendo una red de la que no podrán escapar los asesinos.

La novela comienza con un accidente estremecedor ocurrido cuatro años antes, que será el germen de los acontecimientos que narra la autora; el entorno no podía ser otro que la bella tierra asturiana, querida y conocida a fondo por Huelves y a la que presenta como un personaje más. En este caso nos lleva a los Lagos de Covadonga, Cangas de Onís y Villaviciosa. Será inevitable que el lector se enamore de esos lugares por las descripciones magníficas que hace la autora en las que participan todos los sentidos; sin duda, un canto a la naturaleza a la vez de presentarnos enclaves, grutas, edificios, monasterios y pequeñas iglesias desconocidas por la mayoría de los visitantes de la zona porque no aparecen en las rutas turísticas. Es otra manera, más auténtica e interesante de acercarse a estos lares.

El tercer lago está plagado de leyendas ancestrales que cuentan los lugareños, y como en toda leyenda, siempre hay algo de verdad, afirma Marta, que nos habla de una niña de cabellos castaños que solo se aparece ante aquellos cuya vida está a punto de cambiar, y de un lago fantasma: el tercero de Covadonga.

También se recrea Huelves al hablar de Gijón, porque disfrutar de la playa de San Lorenzo es todo un ejercicio reparador, cuando recibe a los madrugadores con un olor a picante en la nariz. El aire está cargado de sal. La vista sobre el mar es tan poderosa que resulta difícil resistirse; o en las negras noches cuando cae el orbayu en la ciudad, plasmado de manera magnífica por la autora: aparecen los paraguas en fila india por las aceras, charcos con olas, rodadas de barro en los alcorques de los árboles. El edredón nocturno se deslizaba sobre la ciudad con la delicadeza de una madre al arropar a su hijo; la ciudad protegía a los suyos con deferencia, noche tras noche; la oscuridad regresaba para morir con el primer rayo de amanecer…

Marta Huelves con Maudy Ventosa

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Marta Huelves con Maudy Ventosa

En la novela de Marta Huelves nadie es lo que parece porque esta escritora está encantada cargándose estereotipos, como veremos en la entrevista que se publicará mañana y que recomiendo no perderse: un empresario de éxito, modélico ante la comunidad que no es tal; una joven rebelde, frustrada, que solo quiere llamar la atención para esconder el enorme dolor que siente; un inspector de policía bulímico… Dos asesinatos que demuestran que el muerto no siempre es el bueno y un equipo de investigadores que parecen no saber de qué hilo tirar, pero que al final culminan con éxito su cometido. El asesino importa menos que los efectos que produce su acción, nos dice la autora.

En El tercer lago el tiempo parece detenerse para permitir al lector recrearse en las imágenes que, sin duda, implosionan por la belleza que sugieren; el ritmo es lento, pero tiene la magia de enganchar; la introducción de nuevos personajes, como el de la joven psicóloga que ayuda en la investigación nos acerca a la personalidad tanto de los asesinos como de las víctimas; los preppers, movimientos preparacionistas visionarios que se organizan para las catástrofes que traerá el cambio climático… Muchos ingredientes para hacer, sin duda, atractiva su lectura, además, de la pareja Roldán-Bedia que seguro nos deparará buenos momentos y más éxitos a su autora, sin contar con los datos históricos que nos regala Huelves tras la minuciosa investigación que lleva a cabo antes de coger la pluma… porque escribe en papel, ¿lo sabían?

Lo que va a ocurrir, aunque parezca malo, tenía que pasar tarde o temprano, y dentro de un tiempo verás que era natural que sucediera.

La entrevista con la autora, mañana. No se la pierdan.

PERSONAJES:

• Marina Roldán, agente de la Policía Nacional en Gijón. Casada con Carlos, arqueólogo de profesión. Tiene el rostro triste, pasa por una racha incierta. Zapatos siempre impolutos. Sensible ante los micromachismos.
• Salvador Bedia, el inspector. Gomina sobre los cabellos negros, mofletes alfombrados por una barba fuerte y resistente; trazas de gigante. Ojillos negros. Podía mostrarse encantador y al instante poner firme a alguien con la mirada. Casado con Rosa. Vive con ellos la madre de ella, una buena cocinera. Bulímico. Todavía no se ha perdonado.
• Mónica Noval, diecisiete años. Extremadamente delgada, cabellos castaños largos, labios finos. Piercing en el labio inferior, dilatadores en las orejas. Conflictiva. Supo que iba a morir cuando el coche que conducía su madre se salió de la carretera. Le encantan los cursos de supervivencia en el monte.
• Emilio Noval, moreno, delgado y fibroso. Rostro atractivo y mirada que no parpadea. Es un afamado empresario de éxito. Viudo, vive con su hija adolescente; aficionado a la cocina, a la música, a los blues. En la solapa lleva la insignia del benefactor, concedida por el Ayuntamiento por ser buen vecino. Generoso, según dicen.
• Nora Sirgo, licenciada en psicología y experta en redes sociales. Despierta, joven y muy competente. Ojos azules, muy delgada y muy rubia.

Y Evelina Nieda, Veli, la asistenta de la casa de los Noval que encuentra a Emilio muerto. Cara redonda, ojos muy oscuros y figura estilizada. Aspecto juvenil; y Berdayes, un machista policía local; y Carlos Peralta, el marido de Marina, experto en arte prerrománico que aprueba la plaza de arqueología y consigue destino en Gijón; y Cueto, el agente meticuloso; y Nelu, instructor de montaña en el parque nacional de Picos de Europa, padre de Llara, la mejor amiga de Mónica, convencido ecologista; y Gabino Alvarado, Toru, preppers de Arriondas que trabaja para Nelu; y Arturo Requejo, el forense amigo de Bedia, al que le falta el dedo meñique de la mano izquierda y colecciona gafas… y otros que tendrás que descubrir en El tercer lago.

Lee y disfruta de las primeras páginas de la nvela.

La autora:
Marta Huelves Molina (Madrid, 1969),es escritora y divulgadora de Historia, y en todos sus proyectos conjuga la pasión por la literatura con el trabajo de investigación. Estudió Geografía e Historia en la UNED y ha publicado novela corta y varios relatos de carácter histórico. Lectora metódica y apasionada, colabora con medios digitales y páginas web especializadas como articulista.
Su admiración y curiosidad por la cultura asturiana la empujaron a escribir La memoria del tejo, su primera incursión en la novela negra publicada en Maeva Noir con gran éxito de lectores y crítica.
En El tercer lago regresan los investigadores más famosos del Oriente de Asturias.

El libro:
El tercer lago ha sido publicado por Ediciones Maeva en su Colección Maeva Noir. Encuadernado en rústica con solapas, tiene 408 páginas.

Como complemento pongo un vídeo en el que Marta Huelves nos habla de su novela El tercer lago.

Para saber más:
https://www.facebook.com/martahuelves
https://www.instagram.com/martahuelves/