Revista Libros

Entrevista a los coordinadores de: "Ser migrante latinoamericano, ser vulnerable, trabajar precariamente"

Publicado el 07 febrero 2013 por Anthropos-Editorial @AnthroposEd

Elaine Levine


1. Ser migrante latinoamericano, ser vulnerable, trabajar precariamente, presenta una nueva realidad mundial: ¿cuál es esa realidad que quieren presentar en este libro?
En la mayoría de los casos la decisión de migrar no se percibe como una opción sino como una necesidad, precisamente por la falta de opciones para sobrevivir en los países de origen. Por esta razón los migrantes son sumamente vulnerables a las arbitrariedades y los caprichos de los mercados laborales de los países de destino, donde ellos son percibidos y utilizados como mano de obra barata y prácticamente desechable. 

Roberto Benencia

2. Los flujos migratorios latinoamericanos ¿qué revelan como movimientos migratorios específicos?

Los flujos migratorios latinoamericanos hacia los países más ricos en su momento, como durante la década del 2000, donde se pudo apreciar un gran crecimiento de la migración de ecuatorianos, bolivianos y peruanos hacia Europa, por ejemplo, y en menor grado de argentinos, revelaron que las crisis económicas de sus propios países, que repercutían fuertemente en los hogares, sólo podía morigerarse a partir de la migración de su población joven hacia Europa, en particular mujeres. Por dicha razón se pudo apreciar el fenómeno de la feminización de las migraciones, en particular en lo que se conoció como la extensión de la cadena de cuidados entre continentes. 

Fernando F. Herrera

3. ¿Cómo ubicar estos flujos migratorios en el contexto de las discusiones actuales más generales sobre los procesos migratorios a nivel mundial?La severa crisis económica de los años 2008-2009 ha trastornado los flujos migratorios por las altas tasas de desempleo que persisten todavía en varios países de destino, y como consecuencia por el endurecimiento de sus políticas migratorias. En el caso particular del flujo entre México y los Estados Unidos las llegadas han bajado por las pocas expectativas de encontrar empleo y las deportaciones han crecido por las exigencias políticas de frenar la entrada de indocumentados. Lo que no significa que se haya detenido totalmente el flujo migratorio, sino simplemente que las nuevas entradas han bajado. Una situación similar se da entre Latinoamérica y Europa; unos pocos inmigrantes están regresando a sus países, en tanto que la mayoría no ha aceptado las “facilidades” que les otorgan los países europeos para el retorno, aún resisten en condiciones de mayor precariedad aún, lo que incrementa su vulnerabilidad.

4. ¿Qué repercusiones está teniendo este complejo fenómeno migratorio en la sociedad latinoamericana?

El fenómeno es complejo como para hablar de la sociedad latinoamericana; sino que afecta a las distintas sociedades de manera diferente. Por un lado, en aquellas donde las remesas llegan a representar varios puntos del PBI, como en Ecuador o Bolivia, los inmigrantes tratan de resistir en sus lugares de destino, enviando mensualmente sus ahorros a quienes han quedado en sus hogares en el origen, viviendo cada vez más apretados en destino. Y en aquellos otros donde las remesas no representan tantos puntos del PBI, si bien siguen enviando lo hacen más espaciadamente, como son los casos de Argentina y Colombia. En ambas situaciones, el regreso está aún pendiente, con la esperanza de que la situación mejore.


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