La fibromialgia y sus misterios

LA FIBROMIALGIA

Cada año, millones de personas se ven afectadas por un síndrome que causa dolor intenso a largo plazo: La fibromialgia. El nombre de la enfermedad, dice mucho sobre ella, ya que es un compuesto de tres palabras: del griego ” myón” y “algia” (que significa “músculo” y “dolor”, respectivamente) y la palabra latina “fibra”.

Los síntomas de este síndrome van más allá del dolor crónico, y pueden afectar a cada área de nuestra vida. Los trastornos del sueño (tales como el insomnio o el síndrome de piernas inquietas), condiciones médicas relacionados con el intestino (como el trastorno de colon irritable), la artritis, problemas médicos relacionados con la vejiga (tales como una vejiga muy irritable), la depresión y la ansiedad son comúnmente asociados con la fibromialgia.

Además, sus síntomas incluyen bajo nivel de energía, rigidez, migrañas, sensibilidad a cosas tales como olores fuertes o a la luz, y también, muchos otros síntomas que son comunes en otras condiciones médicas de dolor crónico.

A pesar de que esta condición está muy extendida, y ha pasado mucho tiempo desde que este síndrome fue reconocido como una condición médica real, no sólo hipocondría o “imaginación”, todavía hay muchos misterios que lo rodean. Los investigadores están constantemente tratando de encontrar respuestas, pero hasta el momento ninguno ha logrado averiguar algo que sea ampliamente aceptado por un gran número de especialistas en la materia.

El primer misterio relacionado con la fibromialgia es lo que lo causa. Ha habido muchas especulaciones, pero ninguna de ellas ha logrado resistir el paso del tiempo y la investigación más profunda del asunto. Uno de estos supuestos es que la fibromialgia se inicia en el cerebro, cuando se producen desequilibrios químicos que conducen al procesamiento incorrecto de las sensaciones de dolor.

Lo que hizo a esta teoría no muy confiable es precisamente el hecho de que nadie ha descubierto qué es lo que causa, para empezar, las anormalidades cerebrales. Por supuesto, en cuanto a este tema, hubo varias opiniones, de los cuales algunos afirmaron que el estrés y las emociones fuertes, así como ciertas lesiones, pueden causar los desequilibrios neuroquímicos.

Otras teorías afirman que la genética es importante cuando se trata de la evolución del síndrome de fibromialgia. Sin embargo, esto no ha sido 100% probado y, aunque puede ser al menos parcialmente cierto, definitivamente no es cierto para todos los pacientes que desarrollan este síndrome.

Un estudio más reciente en el campo de la Fibromialgia afirma que lo que hace que se desarrolle el síndrome no está, en lo absoluto, relacionado con el cerebro o con las sustancias químicas del cerebro, sino que está realmente relacionado con el elevado número de vasos sanguíneos en las manos, que a su vez, pueden tener un papel muy importante en la forma en que el cuerpo humano percibe ciertas sensaciones (incluyendo el dolor).

Otra teoría menciona que la fibromialgia puede ser causada por el hecho de que los pacientes muestran un aumento en la cantidad de la sustancia llamada “P” en su médula espinal. Esta sustancia es responsable de la sensación de dolor y una alta cantidad de ella también puede hacer que los pacientes sientan el dolor mucho más fuerte de lo normal.

Otro misterio relacionado con este síndrome se relaciona con ciertas afecciones que muy a menudo se superponen: Trastorno depresivo y de ansiedad, artritis, síndrome del intestino irritable, disfunciones cognitivas, el síndrome de dolor miofascial y muchas, muchas otras condiciones médicas. El problema con estas afecciones es el hecho de que los especialistas no han logrado aún decir si son causas / factores de riesgo o si son síntomas causados por la fibromialgia.

Por ejemplo, la depresión se considera a veces el desencadenante de las anomalías cerebrales mencionados antes, pero a veces se considera que es un efecto del dolor prolongado y mal estado general del paciente. Otro ejemplo sería el de los altos niveles de insulina, que son causados por la falta de sueño que por lo general sufren los pacientes. A demás, un trastorno del sueño puede ser a la vez un factor de causa / riesgo y un efecto de la fibromialgia.

El diagnóstico de la fibromialgia puede ser un misterio en sí mismo, ya que el gran número de síntomas son muy comunes con otras enfermedades, trastornos y síndromes que hacen difícil distinguir la diferencia entre ellos. Muy a menudo, los pacientes con fibromialgia son mal diagnosticados con artritis, síndrome de fatiga crónica, síndrome del intestino irritable u otras condiciones médicas asociadas con ella. Además, muchos pacientes se cree que son hipocondríacos, precisamente por el gran número de síntomas que muestran, los cuales pueden ser difíciles de creer como reales.

Los misterios de la Fibromialgia hacen imposible, por el momento ser curada, precisamente porque nadie parece conocer sus causas exactas o incluso sus síntomas exactos (ya que los síntomas mostrados por un paciente pueden variar drásticamente de los síntomas mostrados por otro). Por supuesto, cada uno de los síntomas pueden ser tratados por separado, pero esto no conduce eventualmente a una entera curación del paciente.

Por ejemplo, el dolor se puede tratar con analgésicos, las inflamaciones con fármacos anti-inflamatorios, la depresión puede tratarse con antidepresivos y terapia, y los malos patrones de sueño pueden ser tratados con benzodiazepinas. Por otra parte, una serie de terapias alternativas se puede recomendar: ejercicios de bajo impacto, acupuntura, yoga, Tai-Chi, así como una serie de otras técnicas de relajación.

Hasta que se hagan nuevos descubrimientos para dilucidar el misterio (o, mejor dicho, los misterios) detrás del síndrome de la fibromialgia, todos los pacientes pueden combinar el tratamiento médico (que puede incluir medicamentos y terapia), y técnicas alternativas (tales como los mencionadas anteriormente). Además, una alimentación saludable podrá mejorar los síntomas, sobre todo porque ciertos alimentos son particularmente malos para los pacientes que sufren de este síndrome.

Por ejemplo, se ha demostrado que los alimentos que contienen aditivos pueden empeorar la irritabilidad del intestino, los alimentos azucarados en realidad pueden disminuir el nivel real de la energía, y el café puede afectar los patrones de sueño, incluso más de lo que ya se ven afectados en estos casos. Por otro lado, el pescado graso, ciertas verduras y frutas, nueces y otros alimentos sanos en general pueden hacer que mejore el estado general de los pacientes con fibromialgia.

Si usted observa alguno de los síntomas de la fibromialgia, si siente dolor prolongada (que dura más de 3 meses y afecta a todos los 4 cuadrantes del cuerpo), sin duda debe ir a ver a un médico y que él o ella analice su situación a fondo para determinar si usted puede estar sufriendo de fibromialgia o de otros síndromes de dolor crónico.