Mad Men: contraindicada para exfumadores en riesgo de recaída

Matthew Weiner, guionista de la genial los Soprano, nos trae una historia ambientada en el Manhatan de los años 60, en un mundo dónde la era del consumismo era todavía incipiente, una agencia de publicidad: Sterlin Cooper, se abre paso.

Es interesante ver cómo la aplicación del lema: “no importa el negocio que tengas, sino cómo lo vendas”, invade el mundo de las empresas, introduciendo el marketing en las mismas. De esta manera podemos observar la manera en que estaba organizado un centro comercial hace sólo unos años y lo mucho que diferían aquellos de los contemporáneos.

La "Mad pandi"

En la agencia, reina Don Draper (Jon Hamm), cuyo papel, se podría resumir en dos palabras POR ENCIMA. Es duro, con carisma, brillante y debe serlo en un mundo inhóspito de gente trajeada que intentará hacer cualquier cosa para ganar notoriedad y trepar. Hamm interpreta a un personaje memorable, que se basta para llenar por completo la pantalla.

Donald jugón!!

La principal virtud de la serie es la AMBIENTACIÓN: en su más amplia acepción, si el vestuario y los decorados, nos transportan a otra época; los diálogos, las secretarias, que no se consideran trabajadoras sino meros objetos sexuales, hacen que nos empapemos también de la moral imperante en la época.

Pues sí, son machistas, bebedores, fumadores en exceso, antisemitas y es así tal cómo se nos presentan, no pretenden caer bien al espectador, la empatía puede venir o no, pero se surge más con sus miserias y debilidades, que con lo que dicen o con la manera en la que se muestran a los demás.

La serie lleva un ritmo pausado, con diálogos cuidadísimos y personajes que ganan en profundidad a medida que avanzan los capítulos y nos vamos dando cuenta que tras todos esos egos y tejemanejes, cuando se quitan el traje por la noche, son personas, con sus miedos, debilidades, dependencias.

Termino de devorar la primera temporada y ya estoy deseando conocer más acerca de estos locos del traje. Realmente merece la pena, si los Simpson la han parodiado, por algo será ¿no?.