Por qué viajar te hace más interesante

Hace ya ocho años que no vivo en España, y desde que me he ido de España no he parado de viajar por diferentes países (ya llevo veintitrés y aumentando) y dos continentes. Algunos de mis amigos me han comentado lo que he cambiado a lo largo de estos años. Si miro atrás antes de haber empezado a viajar y a como soy ahora podría decir que viajar me ha hecho una persona más calmada, más abierta a nuevas experiencias, aceptar a la gente por como son y no de donde son y en general me ha hecho una persona mejor.

Pero esto no es sólo que me ha acontecido a mi. De hecho creo que viajar tiene el mismo efecto positivo en las personas, pero cómo es que viajar te hace más interesante. Sencillo ya que:

Serás más social: Es nadar o hundirse en la carretera. Aprendes a hacer amigos con desconocidos y tienes más seguridad hablando con gente nueva.

Serás mejor en las conversaciones: Viajar no te hace sólo más social si no que mejora tu conversación. Después de estar viajando durante una temporada y preguntando siempre las mismas preguntas: de donde eres; a donde vas; por cuanto tiempo; bla bla bla. Cuando llevas una temporada haciendo las mismas preguntas una y otra vez,  las cuales al final te acaban aburriendo y además esas preguntas no te dicen nada de las personas, empezarás a hacer preguntas más interesantes y con significado para conocer mejor a la persona. En tu vuelta además siempre tendrás muchas anécdotas que contar en tu vida normal y dar ejemplos de como se ven las cosas por el mundo.

Tendrás más confianza en ti mismo: Después de haber viajado alrededor del mundo, subido a esa montaña imposible, bajado en rafting, hecho senderismo por países exóticos, estado cerca del circulo polar donde no se pone el sol en verano, cruzado medio mundo en tren, explorado ciudades desconocidas, hablado con un persona en un idioma extranjero y darte a entender. ¿Cómo no puedes estar más seguro de ti mismo? Haciendo tantas cosas te vas a sentir más seguro de ti mismo incrementando tu confianza y tu habilidad para conseguir las cosas que te propongas.

Serás más adaptable al cambio: Seguramente después de haber viajado bastante habrás tenido que lidiar con retrasos en los vuelos, incluso pérdida de alguno o maletas, buses lentos, averías en la carretera, equivocarse en alguna dirección, billetes vendidos, y muchas más cosas que pueden pasar en un viaje.  Después de varias experiencias similares, dejas de preocuparte, de enfadarte, y sólo te adaptas al cambio que ha ocurrido continuando con tu viaje.

Serás una persona relajada: Después de haber tenido tantos problemas, además de haberte hecho usar la imaginación han hecho que seas una persona más relajada, ya que eres capaz de lidiar con todos esos problemas y seguir la corriente sin preocuparte. Si algo me ha enseñado viajar es que todo se resuelve al final así que lo más importante es disfrutar el momento sin necesidad de estrés.

Serás inteligente y culto: ¿Sabías cual fue el primer país que adopto la religión cristiana como religión oficial? Yo tampoco lo sabía hasta que visité Armenia. Excepto que estés todo el día en algún complejo turístico bebiendo tu margarita en la playa, viajar te enseña nuevas cosas. Aprenderás sobre gente, cultura, historia y lugares místicos los cuales alguna gente sólo podría imaginar. En resumen aprenderas más sobre las personas y su forma de vida. Algo que no se puede aprender en los libros, solo con experiencia y viviendo en diferentes lugares.

Serás menos materialista: Cuando estás en la carretera te das cuenta de las pocas cosas que necesitas. Dándote cuenta que la mitad de lo que venden en el centro comercial no sirve para nada, y mucho menos para llevar una vida feliz. Hay un dicho inglés que dice: Cuantas más cosas posees más poseido eres por ellas.

Serás más feliz: Viajar te enseña simplemente a ser feliz. Serás una persona más relajada, que se adapta al cambio y que ve el mundo con diferentes ojos.

Tendrás nuevos puntos de vista: Conociendo nuevas culturas aprenderás a ver las cosas de una forma diferente. A lo largo de

tus viajes si te has mezclado con la población local habrás aprendido nuevas formas de ver la vida. Cosas que antes te parecían muy importantes ahora te parecerán tonterías o verás más soluciones para diversos problemas que puedan surgir en tu vida.

Viajar hace a las personas mejores. Cuando aprendes más sobre el mundo y la gente que habita en él, superas tus límites y pruebas cosas nuevas, te conviertes en una persona extrovertida, abierta y mejor. Toda la gente que he conocido que ha viajado y toda la que me he encontrado en mis viajes encajarían con el perfil que he descrito arriba.

Así que ya sabéis no hay ningún motivo por el cual no estés planeando vuestro siguiente viaje ahora mismo. Ya sea una escapada de una semana a Francia o un viaje alrededor del mundo. Puedes estar sentado en casa cómodamente leyendo este blog y deseando estar en algún lugar exótico haciendo algo divertido o puedes ampliar tu área de confort y hacer tus sueños realidad.

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Si piensas que la aventura es peligrosa, prueba la rutina, es mortal.