Es un local enorme, dos plantas y una entreplanta que le permite crear diversos ambientes y amplias cristaleras que dan al mar. El ambiente playero también se nota en algunos detalles decorativos relacionados con el surf.
Respecto a la comida, tienen un menú de fin de semana de 16,50 euros y un menú del día por 11, 50 euros, (con 5 primeros y 5 segundos para elegir). La carta también es muy variada y mezcla la comida que podemos comer en cualquier restaurante: merluza, pizza, pasta y arroz, con otros platos más elaborados como secreto ibérico, solomillo, o lunettes rellenas (crepes). Eso sí, incluso en los platos más habituales los sirven con salsas muy elaboradas y ricas.Así pues, tienen varios entrantes, que incluyen ensaladas, pastas y picoteo, varias pizzas y tres platos diferentes de carne y pescado. Sirven además varios postres que se salen de los habituales helados, tarta de queso y chocolate.El día que fui yo, el menú estaba semicerrado por tener unos bonos de una página de descuento, así que comí mejillones, risotto de queso idiazábal (me encantó y eso que no soy muy de risotto) y media pizza (las pizzas son grandes pero de masa muy fina)También probé dos tipos de ensaladas y las lunettes de txangurro. Todo muy bueno. Tardaron en servirnos algún platos, pero la verdad es que el local estaba a tope (era un sábado por la noche) y tuvieron el detalle de traernos una pizza sin queso ya que a una de las comensales no le gusta. Un buen sitio para comer, que si bien no es de los más baratos, ofrece comida que gusta a todo el mundo con dosis de originalidad. Como ya he señalado al principio también es coctelería por lo que independientemente de ir a comer a cenar se puede ir a tomar algo a cualquier hora del día, o hasta las doce de la noche.
Y las fotos:
Valoración:
Comida: 8,5Decoración: 8,5Servicio: 7Calidad /Precio: 8
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