La historia del SIDA comienza el 5 de junio de 1981, con ocasión de una convocatoria para conferencia de prensa y por parte de los CDC (Centros de Control de Enfermedades de los Estados Unidos), en la que se describieron cinco casos de neumonia por un germen absolutamente infrecuente (Pneumocystis Carinii).
Al mes siguiente se constataron varios casos de Sarcoma de Kaposi, un raro tipo de cáncer de piel.
Estas primeras constataciones fueron realizadas por el Dr. Michael Gottlieb de San Francisco. La mayoría de estos pacientes eran homosexuales también aquejados de otras infecciones consideradas oportunistas y que murieron varios meses después.
Por la aparición de unas manches de color rosáceo en el cuerpo del infectado la prensa comenzó a llamar al Sida "La Peste Rosa", causando una evidente confusión, ya que se pensó que tal denominación se debía al hecho de ser una enfermedad propia de homosexuales, cuando no era tal: también la padecieron inicialmente los inmigrantes haitianos de los USA, los usuarios de drogas inyectables y los receptores de transfusiones sanguíneas, lo que llevó a hablar de un "Club de las 4 Haches", que incluía a todos estos grupos considerados "de riesgo" para contraer la enfermedad. El día 1 de diciembre se proclamó como Día mundial del SIDA...