Hace 10 años, el 18 de julio de 2011, publiqué mi primera entrada en el blog. Al releerlo siento que es de un primitivismo inocente, muy naif, si este último término puede aplicarse a un texto.
Desde entonces he recorrido un largo camino hasta los 190 artículos que llevo publicados y los más de tres millones de visitas recibidas.
En aniversarios anteriores y en la página de presentación del blog he contado mis dificultades en dar el paso de abrirme a internet, he hablado sobre lo que me llevó a publicar mis artículos y relatos, y de lo que pretendía conseguir con esta aventura.
Ahora después de 10 años, quizás ha llegado el momento de explicar qué es lo Sociología Divertida ha aportado a mi vida.
En primer lugar, diré que no me ha aportado dinero. No fue nunca mi intención. Decía Oscar Wilde que un sentimental es aquel que le da un valor absurdo a todo y no conoce el precio fijo de nada. Soy un sentimental sin duda, no soy un emprendedor como otros compañeros que montan auténticas empresas de divulgación y, poco a poco, de asesoría y consultoría. No lo critico, me parece bien, incluso en algunos casos me parece imprescindible, pues son herramientas de indudable calidad y merecen una compensación. Pero a mi Dios no me ha llevado por ese camino.
Yo soy un hidalgo castellano, un pequeño quijote, medio loco por la lectura de mis particulares novelas de caballería andante. Incapaz de obtener dinero sin un contrato laboral de por medio. Estoy completamente desfasado en este mundo líquido neoliberal para el que no fui educado. Así que sigo siendo tan rico o tan pobre – depende de con quién me compare – de lo que era cuando comencé.
Lo primero que he conseguido ha sido hacerme con un medio para comunicar mis ideas. Explicar cómo es la sociedad y por qué es así. Cuáles son las estructuras sociales, las instituciones, las estrategias, las relaciones de dominación, la estratificación, la movilidad, la interacción y demás palabras que llevan el apellido “social” detrás.
He intentado impulsar el pensamiento crítico, fomentar el uso de la cabeza antes de formarse una opinión, preguntarse qué es lo que hay detrás de cada suceso. No ser meros repetidores de eslóganes o víctimas de las posverdades. Ten en cuenta amigo lector que la mayoría de las conspiraciones no son conspiranoicassino que se hacen delante de nuestras narices con un tratado de libre comercio o con la redacción de una ley o con las decisiones de los mercados. No digo yo que no haya un submundo clandestino y maléfico, pero el verdadero daño a la igualdad, a la democracia y a la distribución de la riqueza no se hace con microchísintroducidos en una vacuna que te puede salvar la vida sino con documentos públicos.
Evidentemente esta intención mía es como remar a contracorriente pues somos unos pocos aldeanos galos contra una hegemonía cultural, mediática, dogmática y manipuladora como jamás antes ha habido en toda la historia de la humanidad.
Esto que acabo de explicar es consecuencia directa de mi intención de divulgar las ciencias sociales por estos mundos de Dios. Si divulgas la filosofía de la herramienta sociológica arrojas luz a todos estos problemas que nos plantea nuestra sociedad posindustrial.
Otra feliz consecuencia es ayudar con contenidos a profesores y alumnos de ciencias sociales. Me llegan muchas comunicaciones, de Latinoamérica sobre todo, de profesores y alumnos. A los primeros parece que les ayuda mi forma de exponer ciertos conceptos y, a los segundos, parece que esa forma de exponer los conceptos les ayuda a entenderlos. Tengo muchos correos y comentarios que me agradecen la claridad, la sencillez y el humor que uso como herramientas para llegar más fácilmente a la comprensión.
Cada vez que recibo uno de estos mensajes, muchos más de alumnos que de profesores he de admitir, tengo un subidón de muy señor mío, me da un alegrón comprobar que lo escribo es útil, le sirve a la gente. Y esto me da fuerzas para continuar, porque no es fácil mantener el listón a la altura que quieres. Investigar, buscar bibliografía, pensar en el enfoque, diseñar los gráficos y demás tareas conllevan un esfuerzo que requiere tiempo.
Tiempo que es el queda después del tiempo que dedico a mi familia y al trabajo por el que me pagan; ambas actividades tienen precedencia sobre Sociología Divertida. Es por esto, que vengo a tardar un mes – a veces dos – en escribir un artículo. Dos o tres semanas trabajando con las fuentes y una semana para la redacción.
La labor continua de 10 años me ha dado un cierto nombre - o quizás marca -. Sociología Divertida aparece como blog de consulta en múltiples programas de asignaturas en centros universitarios, la mayoría en América Latinapero incluso en alguna universidad española. Más aún, en algunos trabajos o tesis de fin de estudios se citan artículos de Sociología Divertida. También aparece en otros blogs de ciencias sociales como dirección de referencia.
Sociología Divertida también me ha abierto, al menos parcialmente, al mundo académico. Las veces que he colaborado en proyectos académicos me ha resultado una experiencia inolvidable, es normal, soy un profesor frustrado. En este sentido, quiero dar las gracias a mi buen amigo el profesor Jorge Crespo de la Facultad de Sociología, Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Universidad Complutense de Madrid.
Por último, Sociología divertida me ha proporcionado un hobby para hacer mi próxima jubilación mucho más llevadera, espero que el esfuerzo que requiere mantenga mi mente joven los próximos 10 o 20 años o lo que quieran los hados y que se mantenga asimismo fuera del alcance del maldito alemán y, si finalmente algo así ocurriera, mi memoria seguirá almacenada en internet y sus futuras sucesoras per secula seculorum amen. Para esto también me sirve Sociología Divertida.
Autor de Sociología Divertida
Dedicatoria
A mi mujer y mis hijos. A esos amigos que me acompañan desde que me topé con ellos por el camino de la vida. A esos desconocidos cercanos de los cinco continentes que piensan que Sociología Divertida merece la pena y, ¿por qué no?, a todo aquel que ha entrado en el blog, el microblog o en alguna de las plataformas buscando información o divertimento o cualquiera otra cosa que anduviera buscando, la encontrara o no.
Más información sobre Sociología Divertida
Biografía
¿Qué es Sociología Divertida?
¿Por qué hago Sociología Divertida?
Presentación 2011-2016