10 mitos sobre fertilidad: ¿Tengo los óvulos contados?

Por Anahigemma @anahigemma

Acabo de leer un informe en el cuál se comenta que, con el arranque de año, muchas parejas inician tratamientos de reproducción asistida. Por lo visto, enero es un mes de repunte de las consultas sobre fertilidad. Así lo notan en centros especializados como Zygos, donde enero suele ser un mes de aumento de consultas.

" Muchas parejas llegan a nosotros tras haber pasado meses o incluso años intentando concebir sin éxito. Cuando les informamos sobre algunas realidades en torno a la fertilidad, se muestran muy sorprendidos ya que nunca se habían planteado ciertos temas. Hay muchos mitos, por lo que creemos que es muy importante aumentar la educación en este sentido", observa la doctora María Graña, directora médica de Zygos.

Desde esta clínica gallega, lanzan un decálogo de las creencias más extendidas:

" Mientras tenga la menstruación, soy fértil". Falso. El hecho de tener todavía la menstruación, no significa que las probabilidades de concebir sigan intactas, ya que éstas disminuyen a lo largo de la vida.

" La edad no influye a la hora del embarazo". Falso. Cuanta más edad tenga la mujer, menores son las probabilidades de embarazo. A partir de los 35 años, cae la reserva ovárica con la que toda mujer nace, por lo que las probabilidades de embarazo están entre el 8 y el 10%. Además, la calidad ovárica también se resiente, lo que aumenta el riesgo de de tener hijos con anomalías genéticas.

" La infertilidad suele ser por causa de la mujer". Falso. Se trata de una creencia proveniente de una sociedad machista, que asocia virilidad con procreación. Se calcula que hasta un 40% de los casos de infertilidad tienen su origen en el hombre.

"El hombre es igual de fértil durante toda la vida". Falso. Si bien el hombre mantiene su capacidad fecundadora durante toda su vida, cuanto mayor es, menor es la calidad seminal, por lo que se incrementa el riesgo de descendencia con patologías genéticas. Además, factores ambientales como el tabaco o la contaminación están disminuyendo la calidad del semen.

"Es muy fácil conseguir un embarazo". Falso. El hecho de mantener relaciones sexuales frecuentes sin protección no significa que sea más fácil la concepción. Por regla general, se recomienda a una pareja que lleva un año intentando concebir sin éxito, que consulte con un especialista. En los casos de mayores de 35, se aconseja consultar antes, ya que el tiempo es importante en los tratamientos de reproducción asistida.

"Mi abuela tuvo su último hijo a los 45 años, así que no hay dificultad para ser madre a esa edad". Falso. El número previo de hijos influye en la fertilidad. Podríamos decir que cuantos más hijos se tienen, más probabilidades de embarazo existen. Por esta razón, en décadas pasadas cuando el ratio de hijos por mujer era mayor, se daban casos de hijos concebidos de forma natural más allá de los 40. En la actualidad, con el retraso en la edad de maternidad, muchas mujeres mayores de 40 han logrado su primer embarazo con la ayuda de procesos de estimulación, reproducción asistida, ovodonación o donación de embriones.

"La infertilidad tiene un origen psicológico". Falso. Es importante mantener la serenidad durante el tratamiento, pero la infertilidad tiene un origen físico.

"Durante un tratamiento de reproducción asistida, las relaciones sexuales han de ser programadas". Falso. Los días de ovulación son especialmente propicios para conseguir embarazo, pero las relaciones sexuales no se programan para evitar convertir el sexo en algo rutinario que pueda llegar a resultar una "obligación" para la pareja.

"Un tratamiento de reproducción asistida es muy caro". Falso. Las clínicas suelen facilitar la financiación. Además, otras vías como la adopción suponen incluso un mayor desembolso económico y largo plazos de espera.

"Una Fecundación In Vitro provoca embarazos múltiples". Falso. Los avances en medicina reproductiva han permitido disminuir el índice de embarazos múltiples, entre otras cosas, gracias a que los embriones implantados en la mujer son cada vez de mayor calidad porque se desarrollan hasta el quinto día en el laboratorio, por lo que se aumentan sus probabilidades de supervivencia durante la gestación.

Si os apetece saber más sobre el tema, dentro de un entorno más desenfado, os recomiendo leer TENGO LOS ÓVULOS CONTADOS de Raquel Sánchez Silva. En esta novela, se habla abiertamente sobre el tema, desmontando falsos mitos, rompiendo tabús y relatándonos una historia (o una trama de ellas) emotiva y de actualidad. A mí, me encantó la manera en la que la autora trató el tema de la fertilidad, sus problemas, alternativas y soluciones, en la mujer y su pareja.

¿Y vosotros? ¿Tenéis hijos? ¿Tenéis ganas de tenerlos? ¿Conocías algunos de los mitos descritos en este post? ¿Os habéis sometido a algún tratamiento de fertilidad? ¿Habéis pensado en ello? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!!

Besos desde mi blog!!