100 Puertas, de N. D. Wilson - Crítica - Novedad

Por Eltiramilla

Título original: 100 Cupboars
Trilogía: 100 Puertas, El fuego del Diente de León, El Rey Chestnut
Rama: fantástica, aventuras
Edición: Laberinto, 2010
Valoración: 4 sobre 5

Henry York se ha enterado de que sus padres han sido secuestrados en Brasil mientras hacían turismo en sus bicicletas y ahora ha de vivir con su tío Frank y su tía Dotts, muy lejos de casa, justo en Kansas. Allí conocerá a sus primas: Penny, la más madura, Henrietta, la emprendedora, y Anastasia, la más preguntona e insoportable de las tres. La vida transcurrirá sin ningún percance, hasta que una noche descubre que detrás de la escayola de la pared de su habitación se esconden unas extrañas puertecillas de múltiples tamaños y colores. ¿Qué son estas puertas extrañas? Él y Henrietta tendrán la oportunidad de descubrirlo cuando se queden solos en casa y, sin quererlo, desatarán un horrible peligro que atentará contra sus vidas. Escondido en algún rincón de aquella casa se encuentra la clave para salvarlos, ahora bien, ¿dónde exactamente?

100 Puertas es una novela juvenil en toda regla, con grandes dosis de misterio y aventura. Al comenzar a leerla se hace un tanto lenta, ya que las primeras páginas resultan bastante introductorias, si bien es cierto que nos ayudan a situarnos en el contexto de la historia.
Henry se ha adaptado tan rápidamente a su nuevo hogar que, aunque echa de menos a sus padres, lo que quiere es continuar en casa de sus tíos, seguir bebiendo refrescos y jugar al baseball. Una situación idílica en la que todo parece perfecto… hasta que descubre las puertas mágicas de su dormitorio, portales hacia otros mundos. Lo primero que le viene a la mente es que detrás de ellas encontrará un montón de calcetines, pensamiento que permite entrever cómo es Henry, un personaje peculiar con un sentido de la lógica muy agudo y, además, portador de un secreto que ni él mismo conoce. Henrietta se inmiscuirá en sus asuntos nada más aparecer, por lo que codo con codo deberán arreglar los entuertos que irán sucediendo.
Definitivamente, se trata de una novela entretenida y rebosante de originalidad con la que N. D. Wilson nos transporta a un ambiente lúgubre y a la vez intrigante, y que cuenta con una narración fresca y un ritmo con altibajos. Durante su lectura uno no puede dejar de pensar qué habrá detrás del misterio de las puertas y, para colmo, nuestra curiosidad aumenta gracias a otros factores mágicos, como el cuarto donde antes dormía el abuelo de la familia que nunca se abre, las extrañas cartas que entran por la puerta en forma de buzón, el horrible gato de mirada penetrante que aparece de vez en cuando en la habitación de Henry… Desde luego, estos y otros muchos elementos nos mantendrán en tensión y atentos a cualquier movimiento sospechoso.

En resumen, un comienzo prometedor para una trilogía que entra de cabeza en mi lista de “muy esperadas” y que muy pronto nos deleitará con una adaptación cinematográfica. ¿Estará a la altura de las circunstancias? Esperemos que sí, porque 100 Puertas es uno de esos libros que te hacen soñar y abren una puerta hacia el ansiado mundo de la fantasía.