Mantener tu huerto urbano en perfectas condiciones, evitando que se desarrollen enfermedades y plagas y consiguiendo que te proporcione buenas cosechas, es como otras tantas cosas una tarea que precisa de habilidad y experiencia, aún así, si te estás iniciando en el arte de la horticultura doméstica, seguro que estos doce consejos te son muy útiles.
1.Ten paciencia
Una condición indispensable para cualquier aficionado a la horticultura, es la paciencia, por mucho que las mires ni por mucho que las abones, las plantas no van a crecer más deprisa.
2.La luz es vital
Considera que para las plantas la luz es su alimento, de ella obtienen los azúcares necesarios para poder funcionar como organismo. Por eso siempre intenta que tengan la mayor cantidad de sol posible, de 8 a 10 horas y orientación sur sería lo adecuado.
3.Cuidado con los fertilizantes
En nuestro intento por producir más y más rápido podemos abusar de los fertilizantes con consecuencias nefastas para la planta; el exceso de Nitrógeno favorece la aparición de plagas, los orgánicos poco hechos pueden ser demasiado fuertes, y en general, en caso de duda es mejor quedarse corto que pasarse.
El exceso de nitrógeno favorece la aparición de plagas
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4.Mantén el huerto limpio
Mantén en lo posible apartados los restos vegetales pues no son otra cosa que focos de infección. Igual sucede con las malas hierbas que sirven de reservorio de plagas y enfermedades incluso sin cultivos presentes.
5.No descuides el riego
El agua es vital para la planta tanto como para nosotros, pero además, en el caso de los vegetales, del agua depende la turgencia de los tejidos y el mantenimiento de su porte. Ante una carencia de agua, la planta se va a desprender de hojas y frutos para ahorrar perdidas de agua, lo que dañara gravemente la cosecha.
6.Observa las plantas en su justa medida
No se trata de estar vigilándolas continuamente pero una pequeña observación diaria nos enseñará muchas cosas sobre ellas, y nos alertará sobre la aparición de enfermedades, plagas y cualquier otro problema. Aún así, para cualquier planta, un exceso de atención suele ser más perjudicial que beneficioso.
La observación en fundamental para detectar enfermedades
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7.Conoce los ciclos
Conocer los ciclos vitales de las plantas puede ser fundamental. Respeta los ciclos naturales de siembra, de floración, los fotoperiodos, etc. Aunque lo recomendable es siempre aplicar la lógica a las características de tu entorno.
8.Elige bien los contenedores
Muchas veces insistimos en usar determinados contenedores o macetas y quizá no sean la mejor opción, pueden tener problemas de drenaje, tener una forma poco adecuada o calentarse demasiado al sol y producir quemaduras (los de plástico negro), y por supuesto, nunca hay que usarlos transparentes. Por otra parte es conveniente saber que el espacio disponible para las raíces condiciona el espacio de desarrollo de la parte aérea de la planta, como sucede en los bonsáis.
9.Organiza el espacio y cuida la densidad
Las plantas necesitan un espacio vital dado por su porte natural, pero también uno para permitir la circulación del aire entre ellas. Esa aireación es fundamental para evitar las enfermedades fúngicas que pronto aparecerán si el aire no circula debidamente.
10.Combina especies
Las plantas como todos los seres vivos se relacionan entre sí, algunas de estas relaciones son beneficiosas y otras no tanto. Aprende que plantas se llevan bien entre sí y cuáles no. Por ejemplo no es conveniente cultivar pepinos y melones juntos.
No es conveniente cultivar melones junto a pepinos por su proximidad genética
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11.Cuida el sustrato
Al sustrato a veces no se le da la importancia que tiene. No es conveniente recoger sustrato de cualquier sitio (especialmente obras y entornos urbanos), puede ser demasiado pesado, esta infestado de nematodos u otras plagas o tener componentes tóxicos para la planta. Si sospechamos que un sustrato es nocivo por cualquier causa, lo más prudente es cambiarlo.
12.Cuidado con las mascotas y los niños
Un último consejo, vigila a tus mascotas y a tus hijos o enséñales a no dañar tus preciado huerto. Pocas cosas dan más rabia que descubrir que tu cosecha ha sido arruinada sin motivo.
Estos doce consejo pueden ser una buena base para empezar a cultivar tu propio huerto urbano, aunque seguro que tú encuentras alguno más que añadir a la lista.