Las emociones son el motor de nuestra vida pero no basta con tenerlas, hay que saber reconocerlas, vivirlas y hacerse cargo de ellas. El peligro viene cuando nos sentimos dominados por nuestras emociones y terminamos por ser títeres a su mando.
Las emociones no son estáticas sino que ocasionan reacciones en nuestro cuerpo, efectos sobre nuestras células, nuestro equilibrio hormonal, lo que se conoce como reacciones psicosomáticas. Estas reacciones fisiológicas ocasionan alteraciones en nuestra circulación, cambios respiratorios, secreciones glandulares, etc.¿Y quien es el encargado de regular los aspectos fisiológicos de las emociones?
El que está a cargo es nuestro sistema nervioso. El sistema nervioso autónomo acelera y desacelera a los órganos y la corteza cerebral. Algunas personas con esa habilidad pueden dominar las reacciones emocionales y llegar a mostrar un autocontrol casi perfecto, pero por lo general nos cuesta y ello requiere un aprendizaje.
¿Te parece importante aprender a gestionar tus estados emocionales?
A parte de resolver mejor las necesidades de ese momento, podrás disminuir el riesgo de enfermedades de tipo somático, psíquico o emocional. Mantener una conducta equilibrada adaptándonos a las circunstancias de forma más objetiva, nos lleva a la madurez emocional.Apunta estas técnicas que pueden servir para comenzar a gestionar tus estados emocionales de manera mas saludable:
1. Adopta una apariencia tranquilaante los estímulos que te provoquen temor. Aunque estés nervioso, el aparentar tranquilidad en tu postura, respiración, gesto, te ayudará a gestionar mejor la situación.
3. Aclara cada día tus pensamientos Procura darle la vuelta a las situaciones o pensamientos destructivos. Puedes probar a hacerte preguntas que te apoyen como: ¿realmente “esto es el final” para mi?, ¿de que me está advirtiendo esta situación?, ¿qué tengo que aceptar?
4. Proyecta en tu mente situaciones nuevascon la información de experiencias del pasado o situaciones nuevas y diferentes. La visualización de la resolución de los conflictos con la información que tenemos derivada de nuestra experiencia, es otra arma de gestión emocional que debemos practicar a diario.