Si el parto ha transcurrido sin problemas, puede iniciar esta rutina de ejercicios en la cama a partir del 2º día después de dar a luz.
1. Estírese boca abajo con los brazos a los lados del cuerpo. Intente levantar un poco la cabeza y a la vez levante las piernas. Manténgase en esa posición siete segundos. Luego baje la cabeza y las piernas. Repita diez veces el ejercicio. Si le cuesta mucho levantar las piernas y la cabeza a la vez, vaya alternándolas. Mantenga el cuello bien recto.
2. Igual que el ejercicio anterior, pero ahora levante primero la pierna derecha y luego la izquierda. Repita diez veces con cada una.
3. Colóquese ahora sobre su espalda, boca arriba, con los brazos estirados a los lados. Levante la cabeza y las piernas como en los ejercicios 1 y 2. Repita el ejercicio 5 veces.
4. Acostada sobre su espalda, apoye los pies hasta que las rodillas formen un ángulo recto. Levante la pelvis hasta que solamente toque el suelo con los pies y la parte superior de la espalda. Manténgase en esta posición durante unos segundos e intente contraer los glúteos. Baje el cuerpo hasta quedar acostada. Al principio, repita el ejercicio 3 veces. Más adelante podrá hacer hasta 10 repeticiones.
5. Estírese sobre la espalda, levante las piernas y haga lentamente "la bicicleta", procure aguantar 5 minutos. Ideal para las varices.