A nivel mundial, la prevalencia de la obesidad y el sobrepeso ha estado en un aumento constante en las últimas décadas. Podría decirse que esta tendencia fea se ha debido en gran parte a los estilos de vida sedentarios, así como los hábitos alimenticios poco saludables que muchos de nosotros ahora se entregan. Las comidas rápidas están reemplazando rápidamente nuestras dietas naturales frescas, ricas en nutrientes, mientras que la llegada de las computadoras / Internet y automóviles cortesía de la tecnología moderna nos haría sentados todo el día con poco o ningún espacio para hacer ejercicio. Sin embargo, es digno de mención que la obesidad y el sobrepeso supone riesgos significativos para nuestra salud, ya que se asocian con miríadas de condiciones de enfermedades potencialmente mortales como la hipertensión, la diabetes tipo 2, cáncer y enfermedad de la arteria coronaria sólo por mencionar algunos. Por otra parte, las estimaciones recientes han demostrado que alrededor de 250 millones de personas en todo el mundo son obesos, mientras que más de 500 millones de personas más están probablemente con sobrepeso. De acuerdo con la American Journal of Public Health, alrededor del 27% de las muertes entre las mujeres con sobrepeso u obesidad se asocian con la obesidad. En lo contrario, los beneficios de la perdida de peso saludable no se pueden exagerar. Una pérdida de peso modesta de 10.5% se ha asociado con una reducción considerable en todo el perfil de riesgo de la obesidad.
En vista de lo anterior, aquí están algunos de los beneficios de la perdida de peso que derivan de la quema de grasa y mantenerse en forma:
Disminución de Riesgo de Problemas CardiovascularesAfortunadamente, una modesta pérdida de peso del 5-10% se ha correlacionado positivamente con una reducción significativa en el riesgo de eventos cardiovasculares como la hipertensión, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y miocardiopatías asociadas a la obesidad. Los estudios han demostrado que cuenta sobrepeso y obesidad durante aproximadamente 25-30% de los casos de hipertensión y que una reducción de 5 mmHg en la presión arterial sistólica y diastólica se puede lograr simplemente por la pérdida de 5-10% del peso corporal. En el mismo sentido, una pérdida de peso modesta ayuda a normalizar los niveles de colesterol, aumentando el nivel de HDL (colesterol bueno) y disminuyendo el nivel de LDL y triglicéridos (colesterol malo). Estos efectos se han demostrado para proteger el corazón. De lo anterior, es obvio que tiene que empezar a considerar bajar algo de peso con el fin de reducir el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular.
Disminución de Riesgo de la DiabetesEl exceso de peso es un factor de riesgo importante para el desarrollo de la diabetes tipo 2. Esto es porque la grasa acumulada hace que los tejidos del cuerpo sean resistentes a las acciones de la insulina, un fenómeno acertadamente descrito como resistencia a la insulina. Como resultado, los niveles de glucosa se elevan en la sangre y no pueden ser utilizados por las células y tejidos del cuerpo. Sin embargo, los estudios han demostrado que las personas obesas reducen significativamente el riesgo de desarrollar diabetes mellitus tipo 2 cuando pierden hasta un 5-10% de su peso corporal. Del mismo modo, se descubrió que aquellos que ya tenían diabetes tipo 2 tenían un mejor control glucémico con medicamentos después de perder algo de peso.
Disminución de riesgo de CánceresLa obesidad se ha asociado con diferentes tipos de cánceres, especialmente de endometrio, mama, próstata, esófago, colon y cánceres de vesícula biliar entre otros. Un estudio reveló que en el 2007, alrededor de 34.000 nuevos casos de cáncer y 50.500 nuevos casos registrados entre los hombres y mujeres, respectivamente, en los Estados Unidos eran atribuibles a la obesidad. Comprensiblemente, una reducción en el peso se ha asociado con una disminución de la incidencia de estos cánceres. Por ejemplo, un análisis de la investigación encontró que si todos los adultos podrían reducir su índice de masa corporal en un 1%, alrededor de 100.000 nuevos casos de cáncer se habrían evitado.
Menos Problemas RespiratoriosLa pérdida de peso tiene la ventaja de reducir el riesgo de enfermedades respiratorias como la apnea obstructiva del sueño, asma bronquial y las infecciones respiratorias que son más comunes entre las personas obesas. Un estudio reveló que una pérdida de peso modesta de 10% los patrones de sueño mejora y reducción de somnolencia diurna entre las personas que sufren de apnea obstructiva del sueño.
Menos Osteoartritis y el Dolor de EspaldaAumento de la incidencia de la artrosis y el dolor crónico de espalda baja se ha observado entre los individuos obesos. Un estudio señaló que, sobre todo entre las mujeres negras e hispanas obesas, la osteoartritis de la rodilla como resultado una reducción sustancial de los años de vida ajustados por calidad. Afortunadamente, se ha demostrado que al perder algo de peso, su riesgo de osteoartritis y el dolor crónico de espalda baja se reduce significativamente.
Menos Riesgo de Problemas ReproductivoProblemas reproductivos como infertilidad, disfunción eréctil, macrosomía fetal (bebé grande) y muerte fetal se han observado más común entre las personas obesas que sus contrapartes de peso normal. La obesidad puede conducir a alteraciones en las hormonas reproductivas femeninas que pueden afectar la fertilidad de una mujer. Además, las células de grasa producen sustancias que conducen a la inflamación y la acumulación de placa dentro de los vasos sanguíneos, un proceso conocido como aterosclerosis. Esto puede bloquear los vasos sanguíneos que irrigan el pene y conducir a la disfunción eréctil que también puede resultar en infertilidad de factor masculino.
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