En el post Arquitectura Bioclimática ¿Gracias a la certificación energética? ya definimos la arquitectura bioclimática, y aunque su definición para muchos puede sonar alejada de nuestra realidad cotidiana, aplicarla es mucho más fácil de lo que parece. Sólo con pequeños gestos podemos acercar nuestra vivienda actual a la arquitectura bioclimática, con los beneficios medioambientales, y económicos y de confort que comporta para nosotros mismos.
Os daréis cuenta de que la mayoría son medidas que ya aplicaban nuestras abuelas hace muchísimos años, pero con el tiempo parece que las hemos olvidado y hay que recordarlas. Y por supuesto, en función de cada caso serán aplicables unas u otras medidas. ¡Cada uno debe aplicar las que se ajustan a su realidad! Vamos allá:
1. Controla la entrada de radiación solar con toldos, persianas o contraventanas
Autor: Carlos de Paz
En verano, evita la entrada de luz solar directa con toldos o persianas. En invierno recoge toldos y levanta persianas para ganar el calor de la radiación solar. Eso sí, son más eficaces los toldos que las persianas, porque permiten una mejor ventilación del aire caliente que se acumula entre el elemento parasol y la ventana.
Esta medida requiere tu participación activa, para ajustar la posición adecuada de los elementos en cada momento. Y si haces esta labor correctamente puedes ahorrar hasta un 30% de la energía que consumes en acondicionar térmicamente tu casa.
2. En las noches de invierno, cierra al completo las persianas o contraventanas.
Las ventanas (incluso cerradas) suelen ser el punto por donde se pierde mayor cantidad de calor, sobre todo por la noche, así que cerrar cada noche las persianas o las contraventanas completamente reduce las fugas de calor indeseables.
3. Crea una ventilación cruzada en verano
Autor: Chris Waits
Si vives en un clima no extremadamente caluroso ni húemds, en verano puedes abrir las ventanas a sur y las ventanas a norte, generando una corriente de aire que aportará una buena sensación de frescor. Esta medida no es posible en cualquier lugar, vivienda o clima, por lo que compueba si en tu caso funciona y si es así ¡Enhorabuena!
4. Durante el día en verano cierra las ventanas totalmente y ábrelas al completo por la noche.
Este punto es aplicable a viviendas donde no hay brisa o la ventilación cruzada no es posible. Aunque hay mucha gente que no acaba de entenderlo porque cree que abriendo ventanas durante el día siempre “entra más fresco”, en Andalucía lo tienen muy claro. Puedes comprobar como en verano las casas de los pueblos están totalmente cerradas durante el día y totalmente abiertas por la noche. ¡Viva la sabiduría popular!
5. Pinta el exterior de tu casa de blanco
Autor: J>Ro
Otro consejo de la sabiduría popular. El blanco es el color que refleja mayor cantidad de radiación y evita la absorción de calor así que ¿por qué no aprovechar esta característica para evitar la acumulación de calor, sobre todo en lugares con veranos muy calurosos? Incluso hay estudios muy prometedores sobre el ahorro energético que se produciría si las cubiertas de los edificios fueran blancas ¿Te atreves?
6. Planta árboles de hoja caduca en la fachada sur
Autor: Red Moon Sanctuary
Si vives en una vivienda con espacio libre en la parcela, esta es una gran opción: en verano la fachada sur (la más soleada) estará en sombra, mientras que en invierno, con la caída otoñal de las hojas recibirá la radiación solar directa. La naturaleza jugando a nuestro favor.
7. Añade una envoltura vegetal a tu fachada sur
Al igual que en el punto anterior, podemos utilizar las plantas enredaderas de hoja caduca como un escudo frente a la radiación solar en verano. Son las precursoras de las fachadas vegetales. Eso sí, actualmente se recomienda colocar algún tipo de soporte que evite daños en la fachada.
8. Coloca películas reflectoras en los vidrios de las ventanas.
Estas películas pueden suponer un ahorro energético de hasta un 20%. Deben colocarse sobre todo en las ventanas a Este y Oeste, ya que es en esas orientaciones donde el sol el verano va más tendido y dificulta el control solar. Son transparentes , baratas y muy fáciles de poner. ¡No hay excusa para no ponerlas!
9. Sella los puntos débiles de tus puertas, ventanas y persianas.
Autor: Jeremy Vandel
Muchas veces los acabados de las viviendas dejan mucho que desear y el encuentro entre ventanas y el cerramiento está mal ejecutado, permitiendo la entrada de aire. Utiliza silicona para sellar esos puntos. Rellena las cajas de persiana con aislamiento (por ejemplo placas de corcho) y sella con silicona los puntos que permiten la entrada de aire a través de ellas. También puedes colocar bajo las puertas de acceso y salida al exterior burletes que eviten la generación de corrientes indeseables.
Y hasta aquí las medidas que os proponemos hoy, En próximos artículos os propondremos muchas más.
-"9 medidas bioclimáticas que puedes aplicar fácilmente en tu casa" originalmente publicado en ECOESMÁS: Un blog de arquitectura, diseño y urbanismo sostenible.-