En verano en todos los centros, hospitales y servicios sanitarios del Sistema de Salud de este país se contrata personal sanitario para cubrir las vacaciones del personal interino y fijo, esto no sólo pasa en sanidad sino en todos los servicios, empresas y demás se contrata personal nuevo para sustituir a los fijos. Todos hemos sido y seremos siempre “los nuevos”, el contratado, con lo que eso conlleva, no conocer el servicio, el hospital, los compañeros, la manera de trabajar……Nadie nace enseñado y todo tiene un periodo de adaptación en el que todos deben colaborar y ayudar para que todo funcione.
Cada año se repiten las mismas historias en verano a causa de malas previsiones de contratación, contratar el personal justo para cubrir “los huecos” y “ya se apañará el equipo”, situaciones complicadas y duras que viven tanto el personal de siempre como los nuevos y creo que habría que poner soluciones factibles cuanto antes para no tener que sufrir cada año las mismas historias, historias que duelen, que sufren los profesionales, pero también las personas a las que atendemos que no tienen la culpa de que “a ellos les importen los números, pero a nosotros nos importen las personas”.
Sigo de vacaciones hasta el día 18 que tengo el primer turno después de esta primera quincena de vacaciones, he estado desconectada de todo durante unos días, algo que hay que hacer hoy en día por obligación y por salud mental. Conviene parar, porque como leía en este artículo de El País el otro día, “necesitamos no hacer nada para encontrar soluciones a nuestros problemas” y porque el cerebro necesita entrar en “modo avión” para ser más creativos.
Y así poco a poco, volviendo a la conexión, entrando en Twitter de nuevo, mirando Facebook, doy con un titular que me dio una punzada en el estómago y que compartía Zulema Gancedo: ” Hubo compañeros que salieron a la calle a llorar de angustia” situación dura que contaba nuestra compañera Carmen Silva, Enfermera de Urgencias del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla durante 15 años. En este artículo Carmen cuenta una situación que pasa en cualquier hospital de este país, en urgencias, en plantas, en UCI, en centros de salud…..a todos os sonará y sabéis de lo que habla Carmen, porque lo habéis vivido, todos lo hemos vivido. Y esta es la realidad.
“El problema es que yo trabajo con personas y no con objetivos” decía Carmen, y yo también Carmen, y pongo la mano en el fuego en que todos trabajamos con personas y no por los números, para que todo cuadre y menos para que den por respuesta ” estáis todos, no entiendo el problema”. Me parece que esta respuesta de un supervisor es cuanto menos acertada, o como dice Zulema mediocre, a lo que en el hilo de este artículo compartido apuntaba Miguel Garvi: ¿ se han convertido las supervisiones en puestos mediocres? Está claro que este artículo da para mucho, hay que conocer la situación, no se puede generalizar, no siempre es así y todo lo que estáis pensando.
No se trata de tener la verdad absoluta siempre, lo que es incuestionable es que este artículo y tantos otros dan para reflexionar en cuestiones de responsabilidad y profesionalismo, como veníamos haciendo con #Zdream y que volveremos a retomar después del periodo vacacional y de verano, cuando todos estemos con las pilas cargadas.
En el hilo de conversación de este artículo que compartió Zulema en su Facebook varios compañeros nuestros aportan opiniones de valor al respecto que os traslado a continuación:
- Raquel Franco Valenzuela: es una respuesta mediocre extensa y frecuente cuando el punto de mira no está en la calidad sino en la cantidad. Y claro, para esos cargos intermedios, les es más fácil gestionar la cantidad. Porque para aprender a gestionar con la calidad se requiere de valores y coraje. De eso que hablamos con Doris Grispun y de lo que carecemos como colectivo.
- Nuria de Argila Fernández-Durán: gestionar con cerebro y corazón. Supervisores y directivos.
- Iñaki González: Una duda! Por qué faltaban 10 de los antiguos la misma noche?
Muchas veces los antiguos somos los primeros que decimos que ese no es mi problema, tengo derecho a permiso y el problema es del supervisor de turno.
Supongo que a más de uno no le gustará este comentario, pero hay que valorar todos los puntos de vista. - Albert Cortés: Sin conocer todos los detalles de la plantilla de ese servicio es complicado dar una opinión. Los que tenemos que gestionar plantillas nos podemos encontrar en más de una ocasión con situaciones complejas multicausales: fiestas programadas, bajas no programadas, ausencias ineludibles (ingresos de familiares…), sustitutos de vacaciones con poca experiencia…
Si puedes recurrir a otros profesionales del turno con más experiencia aunque estén en otros servicios siempre gestionando de manera humanizada y tratándolos con corazón.
Es un riesgo que tenemos todos los que hacemos gestión de proximidad. Un riesgo que debemos gestionar dando la cara y no dejando a nuestros profesionales solos.
Estas son algunas de las aportaciones de compañeros que dieron su opinión al respecto, todas de valor, todas para reflexionar, porque de lo que se trata es de eso, de dar un toque de atención para reflexionar y pensar con responsabilidad y actuar en consecuencia, con profesionalismo y rigor, porque “trabajamos con personas” y no con números, objetivos o para cumplir expediente. Ojalá que se mejore la gestión en este sentido para que el año que viene no volvamos a ver titulares tan dolorosos como este.
AnunciosCon esta entrada quiero mostrar mi apoyo a Carmen y a todos los compañeros nuevos que cubren nuestras vacaciones, a los recién acabados darles mucho ánimo, podéis leer esta entrada de nuestro compañero Juan Carlos “Acabar Enfermería, bienvenidos al principio” que da sabios consejos para cuando se empieza. Y que no se nos olvide que todos hemos sido nuevos, y lo seremos si cambiamos de servicio, así que más respeto y apoyo a nuestros compañeros. Y a los que gestionan decirles que ante todo, todos somos personas, que hay que liderar con corazón, con coraje y valor para que estas situaciones no pasen nunca más.