Y es que, por muy acostumbrados que estemos a la lluvia los del norte, de vez en cuando, el agua también nos afecta a nosotros, y nos baja un poquito la moral. Por eso, una vez más - no es la primera vez que la lluvia me inspira - he decidido combatir el mal tiempo con una ración de optimismo eco, porque, como dicen Sergio y Laura de Vadeláminas.com "para días nublados, paraguas de colores"...
Me encanta esta frase, pero, reconozcámoslo, los paraguas son tan útiles fuera de casa como molestos dentro. Cuando cruzas la puerta después de un buen aguacero, ni el paraguas de colores más bonito del mundo se libra de gotear y mojarlo todo, incluido el paragüero que después te tocará escurrir. Por eso, decidida a ser optimista, pensé que a lo mejor buscando paragüeros bonitos se me pasaba un poco el nublao que tenía encima. Me puse manos a la obra y... ¡sorpresa!, no sólo hay paragüeros bonitos, además, hay paragüeros bonitos y ecológicos, que aprovechan el agua de lluvia para regar las plantas.
Hay muchos modelos, pero para enseñaros me he quedado con tres piezas que, además de por su alma eco, me han conquistado por su diseño.
Umbrella Pot, de Kouichi Okamoto
Green Trace, de Junjie Zhang
reCOVER, de Fulguro
¿A que da menos pereza pensar en la lluvia si al volver a casa nos espera una planta regada con ella? ¿Pondríais alguno de estos diseños en vuestra entrada?
¡¡Feliz martes!!
Pd. Aprovecho para recordaros que el agua, no sólo resulta indispensable para la preservación del medio ambiente, sino también para la salud y el bienestar humanos. El Decenio Internacional para la Acción "El Agua fuente de vida" 2005-2015 de la ONU continúa en marcha, échale un vistazo y toma conciencia.