Todos los aceites esenciales son regenerantes y antisépticos, pero en diferentes grados. Pero para sus aplicaciones dérmicas, se busca sobre todo aquellos que destaquen por su poder regenerante. Por tanto no ha de extrañar, que en los siguientes aceites esenciales, se ensalce su virtud regeneradora. Esta característica regeneradora se traduce en poder antienvejecimiento, tomando esta última característica con mucha cautela.Incienso.Como característica más destacable, su gran poder regenerador i per tanto rejuvenecedor.Propiedades dérmicas: antiséptico, astringente, tónico i cicatrizante.Sándalo.Otro gran regenerador, y por tanto todas las propiedades asociadas a esta cualidad.Propiedades dérmicas: humectante i refrescante para la piel, antiséptico. Regulador sebáceo i por tanto frena de forma preventiva la aparición de arrugas.Manzanilla. Su efecto más destacado, es su poder antiinflamatorio i por tanto calmante de dolores.Propiedades dérmicas: estimula la regeneración celular, aporta luminosidad “ coup d’eclat”. En pieles secas es regenerante i restablece el tono original.Mirra.Otro con gran poder regenerador celular, es decir estimulador de la actividad y renovación celular y por tanto, rejuvenecedor.Propiedades dérmicas: Rejuvenece la piel, aumenta su elasticidad, antiinflamatorio, astringente, cicatrizante i antiséptico.