Sábado 8 de diciembre, 3 pm. Sentía que ya no podía más, caminaba y caminaba pero se me ocurrió comprar snacks en la tienda antes de hacer la cola. Lo camufle en mi mochila y para ese entonces el antojo me ganaba. Las ansias de esperar hasta las 8 de la noche, me ponía súper nerviosa, aún así trate de controlarme. Caminaba alrededor del estadio hacia la primera puerta cuando pase sin ningún problema, sólo que no contaba con la segunda donde si me revisaron y quisieron quitarme mi botín compuesto por papitas al hilo, doritos, tortis. Pero apele al sentimiento de las 2 jovencitas diciéndole que "estaba embarazada" y felizmente se apiadaron de mi. Curiosamente tenía dos entradas que había comprado y en compensación se los regale feliz a estas chicas, corriendo hacia Occidente alta, buscando mi asiento porque estuve muy agitada. Así transcurrieron las horas cuando me encontré con una amiga que conocí en el Flashmode...pero ella no llego sola, fue con un grupo de 10 personas que en conjunto parecían chimenea, por el humo que salía. Al rato, asomaron los músicos y el, Gustavo Cerati. Arranco el concierto con el furor de la gente que acogió en los ochentas a una aún desconocida banda argentina, liderada por un flaquito pelucón de voz potente y clara. La noche transcurría al igual que el set list de lujo, brindado por una reunión mítica que marcaría mi vida, una noche en el Estadio Nacional. Si! Ese día aprendí que el término "humear" no era ajeno a una embarazada de 3 meses y que de repente la euforia se apoderó de mi ser y del padre de mis hijos, deleitandonos con canciones como "Persiana Americana, Profugos o el increíble De Música Ligera" agradeciendo no con el célebre "Gracias Totales" sino con un Gracias Perú por el apoyo y la Oportunidad" arrancando con Vitaminas, cerrando así con broche de oro un concierto mágico, siendo a testigos de la reunión de una gran banda que influyo y aún lo sigue haciendo a las demás generaciones.
Hoy llore por ti Cerati, la tristeza se apoderó de mi ser por tu culpa. Rompiste la esperanza de millones de verte volver al escenario que te vio nacer como la leyenda que ahora eres. Me resisto a creer que ya no volveremos a oírte, sólo nos queda el consuelo de tus discos, para aplacar nuestro dolor, un llanto colectivo porque fuiste el pilar del rock en español, y el de toda una generación que creció contigo y que ahora se resigna a tener que verte en la palestra de las leyendas de la música.Gracias totales Gustavo! Gracias por hacernos vibrar y por esa entrega que nos dejo extasiados ese 8 y 9 de diciembre de 2007, con un Nacional increíblemente repleto, donde no cabía ni un alfiler.... de todos los conciertos a los que ido hasta ahora, ninguno ha llenado este recinto como si lo hizo históricamente con mega éxito el de Soda Stereo. Hoy murió una era, y nace una leyenda, la del músico talentoso que cambió la vida de muchos con su influencia....Hasta siempre GUSTAVO CERATI, Ídolo no Argentino, sino Mundial! Cambio y fuera.